“Nunca habíamos tenido una señal tan clara”

El embajador, Gabriel Silva habló con la Revista Dinero para la edición 382, y contó las e4xpectativas que hay sobre este nuevo paso.  

— ¿Qué ha cambiado para el TLC con Colombia?

Dos cosas básicamente. La primera, que la aprobación de los TLC es quizá lo que más fácil puede poner en marcha la nueva política de creación de empleo del presidente Obama. La segunda, que es el único tema en que convergen los sectores económicos y políticos de Estados Unidos.

— ¿Por qué entonces se define como un ‘pesimista realista’?

Es que llevamos cinco años esperando, a pesar de los esfuerzos de la embajadora Carolina Barco y del gobierno anterior. Por eso tengo una expectativa prudente.

— ¿Han contado los votos? ¿Tienen los suficientes?

Contamos los votos uno por uno todos los días. Incluso, en agosto me recorrí Nuevo México, Virginia, California y Florida, para hacer presencia en los distritos indecisos. Hay una medida preliminar importante, porque en la sesión informal el TLC con Colombia fue aprobado por una mayoría bipartidista significativa en Senado y una mayoría republicana en la Cámara.

— ¿Cuándo se presentará?

Nadie sabe lo que está pensando el presidente Obama. Pero los indicios apuntan a que la Casa Blanca espera que el congreso considere el Sistema General de Preferencias (SGP), y le añada el TAA (Trade Adjustment Assistance) para que dé el campanazo y se puedan aprobar los tratados.

— ¿Qué tan cerca estamos de la aprobación?

Creo que no habíamos tenido una afirmación tan clara y contundente como la que se vio en el discurso del presidente Obama del jueves 8 de septiembre. Ha sido la más enfática.

— ¿Es verdad que Obama llamó a Santos para confirmarle que el TLC pasará en octubre?

Eso no es sino un chisme.

— ¿Pero se presentará en octubre?

No quiero apostar a fechas. Cada vez que el país lo ha hecho le ha ido mal. Pero sí sé cuándo será muy difícil lograr la aprobación y eso es a comienzos del año entrante.

— ¿Qué pasará con el Atpdea?

Creemos que se podría presentar en el paquete de tratados una ley para extenderlo hasta que se implemente el TLC. Podría ser por dos años o hasta que entre en vigencia. También es posible que sea retroactivo sobre los aranceles que se han pagado hasta hoy.