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Instalaciones de producción del campo Rancho Hermoso. | Foto: María Clara Avilán, en Cartagena.

Petróleo y gas

No podemos creer que estamos en bonanza. Esta no ha llegado

Los petroleros advierten al país sobre riesgos y desafíos de la industria de hidrocarburos. Hay que buscar formas eficientes para tratar y transportar crudos pesados. Conferencias del Colombia Oil & Gas Summit en Cartagena.

María Clara Avilán, en Cartagena.
7 de abril de 2011

Hay un gran peligro en creer que estamos viviendo una bonanza de hidrocarburos, cuando esta en realidad no ha llegado, dijo José Francisco Arata, presidente de Pacific Rubiales Energy durante la segunda jornada del Colombia Oil & Gas Summit and Exhibition en Cartagena. Recordó que Colombia no es un país petrolero todavía y que por eso no debería pensar en cambiar las reglas del juego para quienes están haciendo exploración.

También advirtió sobre la amenaza que existe sobre los precios del petróleo colombiano con la llegada de crudos pesados canadienses al Golfo de México. En ese sentido, Julián García, presidente de Gran Tierra Energy, dijo que el reto para el país está en entender cómo tratar y transportar el crudo pesado de manera eficiente.

La agenda
Durante el día se adelantaron diversas conferencias entre las que resaltó el panel presentado y moderado por el Managing Director de IPD América Latina, David Voght, que abarcó asuntos ligados a la producción en Colombia, el ambiente contractual, los desafíos de la industria y el factor de recobro.

En la conferencia participaron además de José Francisco Arata de Pacific Rubiales Energy y Julián García de Gran Tierra Energy, Jack Scott, director de Operaciones de Petrominerales y Héctor Manosalva, VP de Exploración y Producción de Ecopetrol.

La charla inició con la intervención de José Francisco Arata, quién se refirió al incremento en la producción de petróleo en Colombia, que actualmente está sobre los 884.000 bpd. Dijo que el país se acerca a cumplir el objetivo de llegar al millón de barriles diarios.

Además comentó como en tan solo una década Colombia ha duplicado su producción y lo más favorable es que a futuro la tendencia parece seguir siendo positiva. Contrastando a la situación local, Arata mencionó como el volumen extractivo de México y Venezuela se ha reducido. En le caso del vecino país, la producción ha caído hasta casi la mitad.

En ese punto, Jack Scott, director de Operaciones de Petrominerales, piensa que la realidad de Colombia en materia petrolera tiene sus raíces en que se han respetado los acuerdos, lo cual ha ofrecido una plataforma de seguridad esencial para las grandes inversiones.

Hector Manosalva, VP de Ecopetrol, compartió el mismo punto pues piensa que proporcionarles seguridad a los agentes extranjeros ayuda a la normal fluidez del negocio.

José Francisco Arata coincidió en decir que esas políticas implantadas han creado un impacto y un ambiente propicio para el avance de la industria. Sin embargo fue enfático en decir existe un peligro si se considera que estamos viviendo una bonanza, cuando esta en realidad no ha llegado. Inclusive afirmó que Colombia no es un país petrolero y por tanto no se puede pensar en cambiar las reglas del juego.

No obstante, si pensamos hacía futuro, Manosalva cree que Colombia llegaría a ser una potencia petrolera y argumentó su pronóstico diciendo que en las cuentas del país se prevé descubrir 50 millones de barriles. Además resaltó que en materia de exploración tienen el 63% del área prospectiva ya contratado y en actividad explorativa la cifra llega al 20%.

Uno de las factores importantes para que se diera esa proyección es la coyuntura internacional y en esto Arata cree que estarán llegando nuevas oportunidades para la nación, que de hecho ya es considerada como un suplidor bastante confiable. Pero añadió que existe un amenaza próxima para el negocio: la llegada de crudos pesados provenientes de Canadá al Golfo de México. Esta situación representaría un incremento considerable en la oferta, lo cual podría traer consecuencias negativas para el precio del barril.

Con esa perspectiva del entorno, Arata expuso las estrategias que desde su compañía se plantean para lograr sus objetivos. Entre los planes está crear alianzas estratégicas con refinerías de crudos pesados, con acuerdos flexibles, así como empezar a mirar las necesidades de crudo pesado que se evidencian en Asia y Europa.

Atendiendo esa posible demanda por dicho producto, Julián García consideró que la concepción sobre el crudo pesado ha cambiado y que actualmente el reto se centra en entender cómo tratarlo y transportarlo de manera eficiente. Aunque reconoce que “como país estamos aprendiendo de Pacific pues nos ha enseñado a abrir esos mercados”.

De todas maneras, José Francisco Arata cree que actualmente existen numerosos retos en cuanto a la infraestructura nacional. Reconoció que en ese sentido la posibilidad de construcción de un oleoducto hacía el Pacífico sería muy conveniente y apropiado para las proyecciones que se tienen en materia de producción.


Factores de recobro

En este punto del panel, Manosalva manifestó que hoy en día los factores de recobro están entre el 19% y 20% pero se deben incorporar nuevas tecnologías como por ejemplo los polímeros, geles y combustibles in situ para poder aumentar tales factores entre 10 y 15 puntos.

Así mismo, Arata comentó que hoy en día existen métodos muy efectivos para la recuperación secundaria y su aplicación permite tener unos recobros más altos de los que se obtenían anteriormente. Complementado esa apreciación, Jack Scott dijo que en un campo de Petrominerales, gracias al acuífero, tiene un factor de recobro del 50%.


Apertura del mercado gasífero

Paralelamente al tema del petróleo, el gas también tuvo su espacio en la charla y Julián García, Presidente de Gran Tierra Energy, destacó la trascendencia que lleva el empezar a darle más prioridad al gas. Cree que se deben buscar esquemas que posibiliten la ejecución de espacios para la comercialización el gas.

José Francisco Arata reveló que Colombia puede vender un buen porcentaje de las exportaciones de gas a Centroamérica y el Caribe, pues la demanda por este recurso llegó a las 380 millones de pies cúbicos por día.

Regalías y diálogo social

Otra de los puntos que salió a flote fue la discusión generalizada sobre las regalías y su distribución. Antes esto, Héctor Manosalva, como representante de Ecopetrol, comentó que esos recursos que pagan las compañías deben repartirse de una forma más adecuada, garantizando así el financiamiento de proyectos de rentabilidad fiscal.

Para José Francisco Arata, su experiencia al frente de Pacific Rubiales le llevó puntualizar que como ellos hacen presencia en poblaciones pequeñas no pueden tomar el rol de sustituir al Estado pero enfatizó en decir que deben trabajar en proyectos con las comunidades, en los que también se eduque a como hacer uso apropiados de las regalías.

En ese sentido, se entiende que uno de los desafíos que se viene para la industria es la relación con las comunidades. Sin embargo, resalta también las necesidades a nivel de seguridad y medio ambiente.

Ante esos retos, Julián García opinó que tienen que existir espacios de diálogo no solo regionales sino también nacionales, en las que se convoquen a todo tipo de comunidades e instituciones gubernamentales. “Deberíamos tener talleres de trabajo con los ministerios y la ANH para hablar de temas específicos. Si estamos desprevenidos de las coyunturas no podremos tener éxito”, dijo.

Manosalva coincidió con esa afirmación y estimó que la industria trasciende a los gobiernos y que a través de diálogos propositivos se pueden llegar a desarrollar opciones y alternativas que nos beneficien a todos.

Finalmente, el panel concluyó con la afirmación de que tanto las empresas como el país se encuentran en proceso de aprendizaje y que es fundamental trabajar de la mano para potencializar los resultados y las aspiraciones de desarrollo para Colombia.