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La espera de Avantel

Avantel tiene ahora vía libre para ser el cuarto operador de telefonía móvil del país. Comcel y Movistar están obligados a brindar interconexión directa de sus redes con las de Avantel. Estas compañías, sin embargo, no están de acuerdo con la medida. El presidente de Avantel, Carlos Mariño, explica los planes de su empresa.

19 de julio de 2006

La Comisión de Regulación de Telecomunicaciones, CRT, finalmente expidió las resoluciones 1516 y 1517 mediante las cuales define las condiciones de interconexión para la prestación de servicios de telecomunicaciones entre la red de Avantel y las redes de telefonía móvil celular de Comcel y Movistar.

El ente regulador fundamentó su decisión en los compromisos adquiridos por el país tanto ante la Comunidad Andina de Naciones –CAN-, como ante la Organización Mundial de Comercio –OMC-, en virtud de las cuales el país se encuentra obligado a garantizar la interconexión entre los operadores de telecomunicaciones.

De esta manera la CRT establece los principios y garantías que los operadores de telefonía móvil celular y Avantel están obligados a cumplir con el fin de garantizar el interfuncionamiento de las redes y la interoperabilidad de los servicios. Así mismo, fija un cronograma detallado de actividades que deben concluir en menos de dos meses, y define las condiciones generales, técnicas, operativas, comerciales y económicas que deben regir entre las partes.

La disposición de la CRT se traduce para algunos expertos en beneficios directos y tangibles para todos los usuarios, debido que los usuarios de los operadores celulares podrán marcar desde su celular a un Avantel marcando el 350 y los siete números que identifican al usuario (350 es el prefijo asignado a Avantel).

Dinero.com habló con el presidente de la compañía, Carlos Mariño, quien además de hacer un llamado a los presidentes de las empresas móviles que operan en el país para que compitan con verdadera calidad en el servicio, sostuvo que irá con todo hasta el final del proceso y espera que el mayor beneficiado sea el usuario final.

Dinero.com ¿De dónde surge la problemática de la interconexión entre Avantel y los operadores móviles, Comcel y Movistar?

Carlos Mariño. Lo que se está viviendo es la culminación de un largo y tortuoso proceso que viene de cinco años atrás. Avantel viene operando desde 1997 con su licencia de servicios de Trunking, que le da la opción de ofrecer esta clase de servicios y también de brindar telefonía a sus clientes. En ese proceso el tema de telefonía ha sido complejo porque la compañía no ha gozado de los beneficios de una interconexión directa con los operadores celulares y tampoco ha tenido una numeración establecida.

Ahora ya tenemos esos derechos, pero las empresas de telefonía móvil se han opuesto por completo. El proceso fue hasta la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios, quien en forma contundente rechazó las argumentaciones de estas compañías para dar la interconexión. Las conversaciones con los operadores y nosotros se rompieron y no tuvimos otro recurso que demandarlos ante la CRT, para que tomaran cartas en el asunto. Ellos a su vez se pronunciaron y rechazaron de nuevo los argumentos sus argumentos y expidieron dos resoluciones en las que exigen, prácticamente de manera inmediata y estableciendo todas las condiciones económicas y técnicas, para que se lleve a cabo con éxito la interconexión con Avantel.

D. Sin embargo, las compañías celulares siguen inconformes...
C.M. Ellos van a poner un recurso de reposición al cual tienen derecho para protestar por estas dos resoluciones. La CRT tiene dos meses para manifestarse al respecto, pero si sale a favor nuestro, es decir, si la reglamentación se sostiene en todos sus aspectos, la interconexión se tiene que dar en un plazo de 45 días.

D. ¿Cuáles son los principales argumentos que tienen para protestar?
C.M. Primero dicen que no es justo que exista una interconexión con Avantel porque nosotros no pagamos la licencia para la prestación de telefonía celular, pues cada uno de ellos desembolsó en 1993 cerca US$500 millones cada uno a manera de subasta. Este valor no fue un peaje que les puso el gobierno por la licencia, lo que se traduce como una decisión comercial en ese momento. Les ofrecieron exclusividad por 10 años y un acceso a un mercado totalmente virgen. En 2003 cuando entró al mercado Ola, quien pagó US$56 millones, había cinco millones de usuarios. Avantel venía pagando desde 1996 US$4 millones anuales por el derecho de un espectro mucho más reducido. A la fecha hemos pagado US$30 millones y ahora el mercado es de cerca 27 millones de usuarios.

D. ¿Hay espacio para otro jugador más en el mercado móvil?
C.M. Ellos alegan es que no cabe otro operador más, pero cuándo se ha dicho que no cabe otro restaurante, un taxi o una revista más. Lo que el país necesita es un régimen competitivo, abierto y equitativo. La exclusividad que a ellos se les dio no es perpetua, ya dominan claramente el mercado pero no quieren dejar entrar a nadie. Lo que se está presentando acá no es sano para la competencia y en este sector se gasta más en los temas jurídicos que en el servicio al cliente, que en últimas es lo que verdaderamente debe importar.

D. ¿Quienes salen perjudicados si no se aprueba la interconexión?
C.M.  La interconexión es para el usuario y no para el operador, porque éste sin el cliente no es nada. Lo que se le ha limitado al usuario celular es la posibilidad de que se interconecten a tarifas competitivas con los usuarios de Avantel y viceversa, porque no es lo mismo mandar mensajes cortos que hacer una llamada. Cuando entramos Ola al mercado nosotros teníamos el 5% y ahora tenemos el 0,4%. A pesar de la falta de equidad en la que nos movemos y en la que nos ha tocado defendernos, seguimos trabajando en darle al cliente un mejor servicio, en trabajar bajo una normatividad de calidad importante.

D. ¿Cuál es su principal queja?
C.M. Este es un país en el que se ha buscado es que cada empresa sea competitiva, que exista oferta y calidad de servicio, pero para eso deben existir condiciones equitativas. Debemos competir en una forma saludable de acuerdo con metas. ¿Qué ganan con excluir a una empresa como Avantel o qué sentido tiene impedir que participemos de la torta?. Uno no está en el mercado para competir con las empresas no para quebrarlas.

Ahora, nos dan el prefijo 350 en donde hay cerca de 7 millones de números y quieren que nos limiten a 150.000 números. ¿Qué les afecta si ellos tienen varios prefijos? Ponerle un obstáculo a un operador que tiene este tamaño para cualquier cosa que hagamos, es un tema que está en el borde de la competencia ética, porque es un desgaste grande tanto económico como de tiempo para todos”.

D. ¿Se podría llegar a decir que Avantel se convirtió en un cuarto operador?
C.M. No es que seamos otro más y eso es una mala definición porque Avantel ha sido un operador móvil desde 1996. Otra cosa es que no hemos sido contabilizados en las estadísticas y que no tenemos interconexión a las redes celulares. Lo que se está haciendo es darle los derechos a ese operador, pero siempre lo hemos sido. Lo que pasa es que como estábamos en otro nicho diferente, se ha cometido esa equivocación. Son problemas de interpretación y creo que Avantel ha estado marginado de todo ese mercado.

D. ¿Hasta dónde piensan llegar con todo este proceso?
C.M. Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias y para ello hemos tenido un apoyo importante por parte de nuestros clientes. Se han dado pasos grandes para aclarar la situación jurídica. Además, las recomendaciones de la consultoría elaborada por Telecommunications Management Group (TMG) y Devis Granados y Abogados Asociados contratada por el Ministerio de Comunicaciones, que dice que no se debe cobrar una licencia móvil por interconectar las redes de nosotros con los celulares y tener numeración propia, aclara el panorama. Estoy muy confiado en lo que pasará, porque considero que es justo para un operador como Avantel.

D. ¿Han tenido acercamientos con otras compañías para una posible alianza?
C.M. El inversionista extranjero le interesa es el régimen competitivo que tenga cada país antes de invertir y si alguno de ellos no ve claro esto, no le va a meter un peso al mercado. Por ahora estamos concentrados en solidificar la posición de la empresa y lograr el tema de interconexión para el éxito de Avantel hacia el futuro. Pero no descartamos las alianzas y más si le agrega verdadero valor a la empresa y al mercado.
Se han tenido conversaciones con algunas empresas pero por ahora queremos tener muchos aliados de negocio.

D. ¿Cuál será la apuesta para el futuro?
C.M. Le apostaremos sin duda al servicio al cliente y a explotar lo mayor posible la red que actualmente tenemos debido a que es lo suficientemente robusta y está en un 30% a 40% subutilizada, pues lo único que cursa tráfico es la voz. Lo último que haríamos será competir lanzando un plan ‘pioneros’ o algo por estilo porque no se trata de comprar mercado con costos sino con mejores servicios.

D. ¿Traerán nuevas implementaciones?
C.M. Le vamos a apostar a la portabilidad numérica. Esto quiere decir que el número no sea del operador sino del usuario, de tal forma que si un cliente desea cambiar de empresa prestadora de servicio, pueda llevarse consigo su línea. Esto dará la posibilidad de aumentar la seguridad, pues hay un alto porcentaje de delitos que se cometen con líneas robadas o de dudosa procedencia. La idea es lograr que el país vea que esto como una herramienta clave para la modernización de las telecomunicaciones.
D. ¿Realizarán nuevas inversiones?
C.M. Para el tema de interconexión serán necesario hacer una serie de inversiones en hardware y software, las cuales podrían estar alrededor de los US$20 millones.