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¿Que pasaría si se retiran los alemanes de la eurozona?

Golpeado Wall Street

La Bolsa de Nueva York abrió este miércoles con un descenso del 1,77% en el Dow Jones de Industriales, después de que la Reserva Federal rescatara a AIG.

17 de septiembre de 2008

El préstamo fue de US$85.000 millones.

Minutos después de la apertura de la Bolsa de Nueva York, el índice Dow Jones de Industriales, el más importante de Wall Street, bajaba 195,33 puntos (-1,77%), hasta 10.803,69 unidades. El mercado tecnológico Nasdaq descendía 39,94 puntos (-1,89%), hasta 2.166,07 unidades, mientras que el selectivo S&P 500 retrocedía 25,62 puntos (-2,11%) y se situaba en 1.187.98 enteros.

La Fed va a prestar 85.000 millones de dólares a la aseguradora AIG -la más grande de Estados Unidos- para salvarla de la quiebra por la crisis financiera que azota el país. A cambio, la banca central estadounidense va a conseguir una participación de cerca del 80% de su capital.

La operación ha sido confirmada por la Fed después de que la adelantaran el diario New York Times y la cadena de televisión NBC.

A finales de junio, la aseguradora AIG tenía un capital de 1.050.000 millones que serán los que la empresa use como aval necesario para el préstamo. AIG tenía un día de plazo para conseguir los 75.000 millones que la salvasen de la quiebra.

La noticia se ha conocido después de que el Secretario del Tesoro, Henry Paulson, y el presidente de la Reserva Federal acudieran al Congreso para reunirse con miembros de esta Cámara y del Senado para explicarles la situación.

La operación cuenta con el respaldo del presidente de Estados Unidos, George W. Bush, según ha manifestado el portavoz de la Casa Blanca, Tony Fratto, que ha agregado que "estas medidas se toman con el objetivo de promover la estabilidad en los mercados financieros y limitar el daño a la economía en general".


La Fed dijo que, en las actuales circunstancias, una quiebra desordenada de AIG agregaría niveles significativos de fragilidad a los mercados financieros, incrementando los costos de créditos y debilitando la economía. El directorio del banco central informó que el préstamo garantizado fue autorizado con el total respaldo del Departamento del Tesoro "con términos y condiciones diseñadas para proteger los intereses del Gobierno de Estados Unidos y los contribuyentes."

El Gobierno estadounidense recibirá un 79,9 por ciento de participación en AIG y tiene el derecho a veto en los pagos de dividendos para accionistas comunes y preferentes. El plan, que evita la mayor bancarrota de la historia empresarial en Estados Unidos, sigue a los rescates de las financieras hipotecarias Freddie Mac y Fannie Mae hace sólo una semana. Minutos antes del anuncio de la Fed, el banco británico Barclays dijo que adquirirá el negocio de banca de inversión y de mercado de capitales de Lehman Brothers en Estados Unidos por unos 1.750 millones de dólares.

Las versiones que circularon durante el día acerca de la posible solución a los problemas de AIG por parte del Gobierno estadounidense y sobre la venta de la unidad de inversión de Lehman Brothers habían arrojado antes una luz de optimismo acerca de que el tumulto financiero estaría cerca de terminar.

Reportes de prensa sobre posibles remedios para ambas firmas, líderes en sus sectores y las últimas víctimas de la crisis crediticia mundial, distrajeron la atención de inversores decepcionados por la decisión de la Reserva Federal de mantener sin cambios las tasas de interés.

GOLDMAN Y MORGAN, SOBREVIVIENTES
También le pasaron por encima al reporte de una fuerte caída de un 70 por ciento en las ganancias trimestrales de Goldman Sachs Group Inc, el más grande de los dos bancos de inversión estadounidenses que han sobrevivido a la crisis. El reporte de Goldman fue divulgado en medio del nerviosismo de inversionistas, alterados por los anuncios esta semana de la quiebra de Lehman Brothers y la venta apresurada de Merrill Lynch a Bank of America por 50.000 millones de dólares.

Las noticias tuvieron su efecto en Wall Street, que registró una volátil sesión que pasó desde una baja inicial, tras un recorte de calificaciones crediticias de AIG y los resultados de Goldman, hasta un cierre alcista por los reporte de rescate de la aseguradora. Luego de terminar la sesión regular, los inversores tuvieron un respiro porque Morgan Stanley reportó ganancias mejores a las esperadas. Sus acciones subían un 8 por ciento en las transacciones electrónicas luego del cierre.

Goldman y Morgan reafirmaron su confianza en el modelo independiente de negocio de intermediación, a pesar de la reciente quiebra de Lehman, que ocurrió meses después del colapso del banco de inversión Bear Stearns. "Entre Goldman Sachs y Morgan Stanley estamos teniendo algunas modestas noticias positivas en lo que ha sido un período de cinco días por lo demás oscuros," dijo Keith Wirtz, jefe de inversión de Fifth Third Asset Management.

CALMA PARA MERCADOS
El crédito para AIG, que está garantizado por todos los activos de la aseguradora y sus filiales, tiene un plazo de 24 meses y los intereses serán determinados por el balance de una tasa Libor a tres meses más 850 puntos básicos. Está previsto que la deuda sea pagada con los fondos de la venta de activos de la firma, dijo la Fed. "El propósito de esta línea de liquidez es ayudar a AIG a cumplir con sus obligaciones en la medida que caducan," agregó en un comunicado.

En otro signo de cuánto las autoridades estadounidenses están tratando de calmar el nerviosismo, el banco de la Reserva Federal de Nueva York tomó la inusual medida de apuntalar a los mercados financieros con unos 87.000 millones de dólares para apoyar operaciones de unidades de Lehman y evitar una mayor turbulencia.

A través de la compra de las operaciones de Lehman, Barclays asumirá negocios que emplean a unas 10.000 persona, según un comunicado del banco. Además, se hará cargo de activos bajo administración y obligaciones del que fuera el cuarto mayor banco de inversión de Estados Unidos.

AIG BAJO PRESION
Los títulos de AIG cerraron el martes con una baja de un 21,2 por ciento, a 2,5 dólares, en la Bolsa de Nueva York; pero en las operaciones electrónicas tras el cierre del mercado caían otro 48 por ciento por las expectativas de que el rescate borre a los accionistas de la empresa. La compañía sufrió 18.000 millones de dólares en pérdidas en los últimos tres trimestres, a causa de las garantías que suscribió en derivados vinculados a hipotecas.

En junio registró activos por 1,05 billones de dólares, con lo que su eventual quiebra sería mayor a la de Lehman, que dijo que terminó agosto con 600.000 millones en activos. AIG cerró 2007 con 116.000 empleados, más de cuatro veces los de Lehman. Un colapso de AIG hubiera aplastado aún más a los mercados de valores, que tuvieron el lunes el peor día de Wall Street desde su reapertura tras los ataques del 11 de septiembre del 2001.

Los detalles
En un primer momento, el banco central había pedido a los bancos Goldman Sachs y JPMorgan que aportaran los 75.000 millones necesarios para evitar la quiebra. Sin embargo, la caída en bolsa de las acciones de AIG disuadió a los bancos de comprometer la cantidad por lo que ha sido la Fed la que se ha hecho cargo. Normalmente, la banca central estadounidense no está autorizada a aportar liquidez a las aseguradoras, ya que éstas no están bajo su supervisión.

Sin embargo, un miembro de la Fed ha desvelado que se ha acometido esta operación, al contrario de lo que ocurrió con el banco de inversión Lehman Brothers, por el efecto dominó que podría tener la caída de la aseguradora en otras empresas y en productos financieros minoristas como los seguros y anualidades garantizadas.

AIG opera como reaseguradora de multitud de compañías de seguros de todo el mundo, por lo que su quiebra hubiera arrastrado a otras entidades y también habría disparado las primas de riesgo en el sector. Además, una eventual quiebra de AIG habría complicado aún más el sistema financiero mundial, ya que una situación precaria tras la quiebra de Lehman Brothers.

AIG es la mayor aseguradora de EE.UU. y cuenta en todo el mundo con 74 millones de clientes, la mayoría norteamericanos. AIG emplea además a 116.000 personas en 130 países.

 

 

Agencias