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ANÁLISIS

Y ahora, ¿quién podrá salvarnos?

En Colombia la cuarentena se alargó por más de cinco meses, generando nuevas implicaciones sociales, de salud pública y económicas que nos han golpeados a todos sin consideración.

María Paulina del Castillo*
27 de septiembre de 2020

Sin embargo, si miramos con lupa y desagregamos la información disponible de manera diferenciada, sin duda alguna, el impacto para las mujeres ha sido más alto.

De acuerdo con el Informe del Dane, la cifra de desempleo para el mes de julio fue de 20,2%, pero si examinamos con ojo analítico y con las gafas de género este dígito, resulta absolutamente desproporcionado para las mujeres: 25,5% de desempleo frente a un 17% para los hombres (información trimestre móvil mayo-junio 2020).

Y ustedes se preguntarán, ¿por qué a las mujeres las afecta más que a los hombres? Hay muchas razones, pero sin lugar a dudas se pueden concentrar en una sola: los estereotipos y sesgos de género que hacen que las labores del cuidado recaigan sobre las mujeres (hablamos de actividades como, el cuidado de hijos/as, hogar, adultos mayores y/o enfermos).

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De acuerdo con el al Dane (2017), las mujeres dedican más de 7,2 horas al día a labores del cuidado, frente a las 3,4 horas que dedican los hombres. Por otra parte, un estudio realizado por el PNUD a inicios de este año, evidenció que el 88,35% de la población mundial tiene al menos un sesgo contra las mujeres, en Colombia esta cifra aumenta al 91,4%. 

El 40% de la población considera que un hombre es mejor ejecutivo de negocios y 50% opina que un hombre es mejor líder político. La combinación de estos factores es una bomba de tiempo, que de perpetuarse, no hará más que ampliar las brechas de género y anular los esfuerzos que  han venido desarrollando algunas  empresas del sector privado.  

Y ahora, ¿quién podrá salvarnos? Justamente son las empresas, que por años han creído en la equidad de género como una estrategia transversal a la organización, que destaca en este modelo la manera de ser más competitivos y productivos pues ya están haciendo la tarea de una forma juiciosa, implementando acciones específicas para salvaguardar a las mujeres de sus organizaciones y brindarles herramientas a los hombres. 

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De acuerdo con el Informe de Gestión de Crisis con Enfoque de Género de Aequales de junio 2020, estas son algunas herramientas que recomendamos:

  • Propiciar espacios para la maduración de un liderazgo más empático e inclusivo que tenga en cuenta las necesidades de todos y todas.
  • Establecer horarios para las reuniones de trabajo, entendiendo que hijos e hijas se encuentran en colegio en casa y que padres por igual deben velar para el desarrollo de esta labor.
  • Cambiar los horarios estrictos de entrada y salida por horarios flexibles, entendiendo las necesidades de sus empleados/as.
  • Rediseñar las evaluaciones de desempeño sobre la base de cumplimiento de objetivos y/o logros semanales o mensuales más que sobre cumplimiento de horarios.
  • Aumentar la participación de las mujeres en los comités de crisis para la toma de decisiones sobre la pandemia.

¡Hay esperanza! Si las organizaciones públicas o privadas, tienen la voluntad para implementar una o varias de estas medidas, la tendencia cambiará, y las brechas de género en el ámbito laboral no seguirán ampliándose y consecuentemente disminuirá la reproducción de las desigualdades.

*Directora comercial para Latinoamérica de Aequales