Los analistas han señalado que en las actuales circunstancias, la volatilidad en los mercados continuará en las próximas semanas. | Foto: Efe

Economía Mundial

Todas las miradas están puestas en los mercados bursátiles

Los mercados mundiales afrontan este lunes una jornada crucial, que estará marcada por las repercusiones de la rebaja de la calificación crediticia de Estados Unidos anunciada por la agencia Standard & Poor’s (S&P) y los problemas de la deuda en Europa.

Alianza BBC
8 de agosto de 2011

Las bolsas de Asia abrieron a la baja, continuando con la tendencia de la semana pasada, cuando la mayoría de índices bursátiles del planeta registraron importantes pérdidas.

El selectivo Nikkei de la bolsa de Tokio cayó un 2,17%, mientras que los mercados de Hong Kong, Seúl y Shanghái registraron pérdidas del 4,1%, 3,82% y 3,79% respectivamente.

En Europa, los mercados español e italiano se elevaron en los intercambios iniciales, para después descender, mientras índices europeos importantes cayeron de forma aguda.

En Londres y París, el índice FTSE 100 y Cac 40 perdieron casi 2%, mientras que el Dax, de Francfurt, cayó casi 3%.

Los responsables de finanzas de las principales economías del planeta mantuvieron conversaciones durante todo el fin de semana para coordinar una estrategia que permita evitar que el pánico se apodere de nuevo de los mercados.

Y es que tras los acontecimientos de los últimos días -con el incremento de la prima de riesgo de España e Italia hasta niveles récord y la salida de EE.UU. del club de países cuya deuda ostenta la calificación AAA (ahora es AA+)- muchos temen que se pueda repetir una situación similar a la vivida tras la caída del banco estadounidense Lehman Brothers hace tres años.

Así, este domingo el Banco Central Europeo (BCE) informó que va a "implementar" su programa de compra de deuda pública, con lo que dio a entender que podría empezar a adquirir deuda soberana de España e Italia para evitar un contagio de la crisis a estos países.

La estrategia del BCE -que según explicó el analista de asuntos económicos de la BBC Robert Preston enfrenta la oposición de varios países de la eurozona- fue dada a conocer después de que los consejeros de la autoridad monetaria europea celebraran una videoconferencia de urgencia.

Los altos niveles de deuda del gobierno español e italiano, junto con el bajo nivel de crecimiento que experimentan ambos países y la dubitativa respuesta de los líderes de la zona euro a la crisis, han provocado el temor de que Madrid y Roma queden envueltos en la misma espiral que obligó Grecia, Irlanda y Portugal a pedir sendos rescates.

Apoyo a los mercados
Mientras, los ministros de Finanzas del G7 -que reúne a las potencias económicas más importantes del planeta- también sostuvieron este domingo conversaciones de emergencia para ver cómo calmar a los mercados antes de su apertura este lunes.

Tras las mismas, el grupo de países ricos emitió un comunicado en el que afirmó estar decidido a llevar a cabo medidas coordinadas para asegurar la liquidez y apoyar al funcionamiento de los mercados financieros, la estabilidad financiera y el crecimiento económico. Los analistas han señalado que en las actuales circunstancias, la volatilidad en los mercados continuará en las próximas semanas. La decisión de S&P de rebajar la calificación de los bonos del Tesoro de EE.UU. -que ha sido duramente criticada por las autoridades estadounidenses- no hizo más que echar leña al fuego.

"Esta rebaja es un hecho sin precedentes", señaló al analista Alvin Liew, del banco UOB de Singapur.
"Tiene implicaciones y demuestra que las perspectivas de crecimiento en EE.UU. siguen siendo pobres y seguirán así durante los próximos dos o dos años y medio", aseguró Liew.

Por su parte, la agencia de calificación de riesgos Moody's repitió este lunes su advertencia de rebajar la nota de EE.UU. antes de 2013 si se debilita significativamente la perspectiva de su situación fiscal o macroeconómica.

Temores
S&P justifició su decisión en la preocupación por el enorme déficit de Washington y la ingobernabilidad derivada de las disputas entre demócratas y republicanos. La agencia no se dejó impresionar por un acuerdo de última hora alcanzado la semana pasada para aumentar el límite de deuda en US$2,4 billones. Con él se evitó un potencial default (cesación de pagos) de EE.UU., pero sólo se logró tras meses de disputas en el Congreso estadounidense.

La rebaja -que podría elevar el costo del endeudamiento de EE.UU.- no fue bien recibida por la Casa Blanca.

Un asesor económico de Barack Obama condenó la decisión de S&P. "Parece que la institución ha comenzado con una conclusión y ha dado forma a algunos argumentos para que se ajusten a ella", dijo Gene Sperling. La rebaja podría reforzar el temor de muchos inversores de que la economía de EE.UU. reduzca su ritmo de crecimiento y entre en una nueva recesión.

Si ello sucediera, los efectos también se dejarían sentir en el resto del planeta.