Imagen reflejada en un espejo del presidente de la Reserva Federal (Fed) de EEUU, Ben Bernanke | Foto: EFE

Crisis Financiera

Polémica inyección de dólares a la economía de EE.UU.

Los mercados reaccionaron al alza ante las audaces medidas de la Reserva Federal para estimular la economía y reducir el desempleo. Críticos acusan al banco central de perder independencia y aliarse con el gobierno federal.

Alianza BBC
14 de septiembre de 2012

El banco central de Estados Unidos, la Reserva Federal (Fed), anunció la aplicación de una serie de medidas para estimular la lenta recuperación económica del país y bajar el índice de desempleo que catalogó de "preocupante".

Ben Bernanke, el presidente de la Reserva Federal, anunció la nueva ronda de estímulo que incluirá la compra de bonos respaldados por hipotecas por valor de US$40.000 millones para inyectar más liquidez a la economía.

Las bolsas de valores reaccionaron positivamente ante el anuncio -prueba, para algunos, de la necesidad de la Fed de intervenir- pero los críticos denuncian que el banco se está entrometiendo en áreas que le corresponden al gobierno federal con graves consecuencias políticas y económicas.

Tercer intento

Esta es la tercera vez que la Reserva Federal interviene para estimular la economía desde la profunda crisis financiera que afectó el país y el mundo.

Ben Bernanke detalló que la compra de los bonos está diseñada para "acelerar la recuperación", al mismo tiempo que afirmó que extendería las bajas tasas de interés hasta por lo menos mediados de 2015.

"Ya era hora", comentó a BBC Mundo Isaac Cohen, analista independiente de asuntos económicos y financieros y antiguo director de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe, CEPAL. "La Fed reconoció que la economía del país no ha estado creciendo lo suficiente y tenía que actuar".

La compra de los títulos garantizados implica imprimir más papel moneda para dar liquidez. Cohen dice que el banco central se puede permitir tomar esa medida porque se da en un contexto de inflación subyugada.

"Creo que es saludable, pues va a aumentar la demanda cuya falta es lo que está frenando la economía del país", afirmó el economista.

Las tasas de interés bajas a mediano plazo van a forzar a los inversionistas a buscar otras fuentes de rendimiento así que las acciones se verán favorecidas, explicó. De hecho, las boslas de valores han reconocido esto muy rápidamente y reaccionado a la alza.

"La esperanza es que haya más crédito disponible, más endeudamiento, lo que ayuda a la inversión, al gasto y al consumo personal", manifestó Isaac Cohen.

No todos comparten ese optimismo, sin embargo.

"Es una mala noticia", expresó Ian Vásquez, director del Centro para la Libertad y Prosperidad Global del Instituto Cato, un centro de investigación en Washington que aboga por la libertad de los mercados y menos intervención del gobierno. "Parece que el banco central no ha aprendido de las últimas dos medidas de este estilo que fracasaron".

Vásquez indica que uno de los grandes problemas de la economía es que el gobierno está gastando demasiado cuando ya tienen una deuda muy alta y que con esta medida la Fed está "imprimiendo dinero para financiar el déficit de EE.UU."

Empujón a Obama

Lo cierto es que la política fiscal de Estados Unidos está paralizada por el enfrentamiento que hay entre los partidos republicano y demócrata en torno a cómo reducir la deuda y balancear el presupuesto nacional.

Como la Cámara de Representantes está en manos de los republicanos y el Senado y la Casa Blanca controlados por demócratas, se ha dado una situación de estancamiento donde ninguna de las partes quiere ceder. La situación ha tomado mayor dimensión en el marco de las próximas elecciones generales.

"Con esa movida casi que se podría decir que Bernanke acaba de reelegir al presidente Obama"

Ian Vásquez, Instituto Cato

Ian Vásquez considera que, con la medida de Bernanke, no sólo se están posponiendo las decisiones difíciles que los políticos deben tomar con respecto a la crisis fiscal sino que la Reserva Federal está metiéndose en territorios que solo le corresponden al gobierno central con graves consecuencias políticas.

"Con esa movida casi que se podría decir que Bernanke acaba de reelegir al presidente Obama", declaró. "Le ha hecho un regalo enorme porque le está financiando gastos irresponsables".

El analista del Instituto Cato recalca que el gesto acaba con uno de los grandes aportes de EE.UU. de mantener sus instituciones separadas, con un banco central que mostraba su independencia.
Política fiscal vs. política monetaria

Isaac Cohen reconoce que los efectos inmediatos de las medidas podrían darle "un empujón" al presidente Obama pero alerta que los efectos reales se sentirán mucho después de las elecciones.

Opina además, que con el anuncio de este jueves, Bernanke está demostrando precisamente esa independencia. "La Fed se veía antes como intimidada porque había miembros del Partido Republicano que le decían a Bernanke que no fuera hacer nada pues estaría ayudando a la reelección del presidente", afirmó.

"El que haya actuado es un símbolo de su independencia, está comprobando que no tiene preocupaciones políticas", manifestó el exdirector de CEPAL.

No obstante, Ian Vásquez de Cato insiste en que el banco central existe para mantener la moneda estable y que los otros temas de política económica son asuntos del gobierno.

"Uno de los probelas es creer que el banco central puede resolver el desempleo y está comprobado que no puede", declaró. "Le han metido tanto dinero y cada vez el desempleo es más alto".

Sin embargo, Isaac Cohen dice que cuando hay dos instrumentos -la política fiscal y la política monetaria- y el primero esta frenado, la política monetaria tiene que entrar a operar.

"La Reserva Federal tiene la obligación de actuar cuando hay mucha inflación o cuando hay mucho desempleo. Es un mandato doble", dijo. "Es este caso hay desempleo. Mientras exista esa situación tiene que tomar medidas".