Gimnasios 'sudan la gota gorda' y acuden a Facebook para no morir

Desde el pasado 16 de marzo los gimnasios del país, tanto las grandes cadenas como los más pequeños, no abren sus puertas. 

Esto significa que no han recibido ingresos desde ese entonces, al tiempo que muchos de ellos mantienen los pagos de nómina, arriendo, energía, agua, etcétera, muchas veces apalancados con préstamos bancarios. 

Y en el caso de las micro y pequeñas empresas del sector, muchas ya están en cesación de pagos, debido a que desde el cierre total no obtienen ingresos para cubrir su operación y compromisos económicos. 

Con el atenuante que muchas de estas pequeñas empresas “no” son sujeto de crédito o su capacidad de endeudamiento ya está copada.

Ante la situación empresarios como César Casallas de Spinning Center, Wilder Zapata de Action Fitness,  Óscar Giraldo de la Asociación de Gimnasios de Cali, Gigliola Aycardi de Bodytech y Athletic, Ricardo Beltrán de gimnasios independientes de Bogotá y David Raya de Smart Fit, le recordaron al gobierno y al país que las cuatro principales cadenas emplean a más de 10.000 personas y la industria en general unas 20.000.

Además, reiteraron que es necesario “ser declarados como un sector vulnerable. Ni el Ministerio de Industria, ni el de Deporte ni el de Salud se han pronunciado al respecto. Así mismo, urge que sean delineadas las directrices bajo las cuales podamos reanudar nuestros servicios, con análisis de salud cuantitativa y no con restricciones generales o ambiguas. Por ejemplo, todo el sector ha redoblado esfuerzos en el tema de la sanitización y estamos preparados para brindar el servicio con el mínimo riesgo posible”, afirmaron en un escrito conjunto.

Los empresarios plantearon que se registran más de 2.500 pagos de arrendamientos en incumplimiento, y hay preocupación por lo que viene porque los administradores saben que no necesariamente van a entrar a la normalidad cuando finalice la cuarentena.

Ante esa cruda y difícil realidad, varias compañías del sector empiezan a ver opciones para mantener tanto el posicionamiento de la marca a flote, como la fidelidad de muchos clientes habituales. Y la mejor manera de lograr esto parece ser a través de  tecnologías como Facebook Live.

Varios gimnasios dan pasos aún más atrevidos y están reinventando y migrando su modelo de operaciones a un proceso de digitalización y uso de plataformas para llevar el deporte a un canal al cual todos tengan acceso desde sus hogares.

La cadena Bodytech tuvo que cerrar 170 sedes en 3 países, poniendo como prioridad la salud de los usuarios y de la comunidad en general. 

Sin embargo, han asumido nuevas maneras de trabajar: a través de la digitalización. Si bien ya lo venían haciendo, se ha convertido en el principal escenario de actuación para seguir acompañando a sus afiliados y llevar su marca a otras personas. 

Actualmente cuentan con clases vía streaming que se transmiten a través de las redes @clubbodytech y @bodytechperu en Facebook e Instagram donde los videos quedan disponibles en los perfiles para que puedan acceder a ellos cuando necesiten. 

Igualmente, cuentan con un Blog ft, en donde comparten artículos sobre nutrición, entrenamiento y salud son complementados en su mayoría por videos hechos por sus especialistas. 

Según cifras de Bodytech, debido a esto, sus redes han tenido un incremento muy grande, la comunidad de Instagram creció en un 47% y sus IGTV (aplicación de video) tienen un alcance en promedio de 11.000 personas y la comunidad de Facebook creció 4% pero es la que más alcance tiene en los Facebook live con 25.000 personas conectadas. 

Para acceder a estas clases en línea, los afiliados y no afiliados solo deben tener una cuenta activa en Facebook e Instagram para tener acceso a todo el contenido.  

En promedio están dictando 5 clases en la semana así como haciendo streaming de recetas saludables, asesorías con el Dr. Bodytech quien responde en vivo y también asesorías nutricionales con respuestas en línea.

En Bogotá, Need My Rush, negocio que se ofrece el servicio de ciclismo bajo techo, pudo adaptar medidas para prepararse ante la crisis. 

“Una semana antes de iniciar cuarentena tuvimos que cerrar puertas. Afortunadamente pudimos reaccionar muy rápido y al día siguiente de cerrar las puertas del gimnasio, empezamos a alquilar nuestras bicicletas para poder ayudar a nuestros usuarios a poder continuar haciendo ejercicio. Tuvimos tan buena respuesta que alcanzamos a comprar 50 bicicletas más de las que ya tenemos en el estudio y entregarlas a los clientes antes del inicio de la cuarentena. A la fecha hay 110 personas con bicicletas entregadas en sus casas”, indicó Pablo Arciniegas, fundador y gerente de Rush.

Para la continuación de su negocio, se han apoyado completamente en la tecnología y redes sociales, como Instagram y Facebook así como en su página web.

“En Instagram nos sorprendió la cantidad de personas que se enteraron que estábamos alquilando las bicicletas y se interesaron y en Instagram Live empezamos a promocionar las clases. A nuestra comunidad le ha encantado el formato, agradecen la forma en que nos reinventamos e incluso los que no tienen bicicleta realizan el ejercicio sin equipo", comentó. 

"Estas herramientas han logrado que crezca la comunidad, hemos tenido un incremento en seguidores en Instagram de casi 15% y en Facebook 10% y nos llega nueva gente. Los Instagram Live, también son utilizados para que los entrenadores y el personal de Need My Rush charlen con sus usuarios", dijo el empresario.

Por su lado, el gimnasio de entrenamiento funcional Powerfit, con sede en Barranquilla y Medellín, tiene planes tanto gratuitos como pagos para seguir brindando su servicio y protegiendo su negocio.

“Creo que somos uno de los sectores que más va a sufrir, al ser un sector que no mueve mucho la economía no lo van a reactivar rápido. Y cuando lo reactiven vamos a empezar a operar con muchas restricciones”, mencionó su fundador, Daniel Jaramillo. 

Powerfit cerró sus dos sedes, y desde entonces opera de manera digital, una estrategia que venían desarrollando desde antes de la pandemia. “Siempre habíamos mantenido la estrategia de ir a la vanguardia y digitalizar porque nuestro público objetivo eran jóvenes. Por eso ya teníamos una aplicación propia y un sistema avanzado que ha facilitado responder a esta crisis. Empezamos a hacer en vivos diarios, alquilamos todos los equipos a los usuarios, para así generar algún ingreso”, dijo Jaramillo.

En los vivos de sus cuentas abiertas de Instagram powerfit_co y powerfit_medellin hacen entrenamientos 3 veces por semana además de ofrecer clases de spinning, boxeo, yoga. Estos servicios  son gratuitos para aquellos usuarios que no pueden continuar con sus planes pero han apoyado este gimnasio por muchos años. 

Para las personas que siguen realizando pagos crearon una cuenta privada de Instagram a la cual tienen acceso a las personas con planes activos, un espacio a donde están trasladando todos sus servicios. De igual manera, a través su aplicación propia, los clientes pueden reservar clases semi personalizadas que se realizan video llamadas de WhatsApp, para vincular a los entrenadores que no siempre tienen alto alcance de internet en sus planes.

Finalmente, los entrenadores personales al no poder hacer uso de parques ni ingresar a los domicilios de sus clientes, han ampliado su audiencia ofreciendo clases virtuales también dándose a conocer entre más personas.

Tal es el caso de David Miramón, entrenador personal y dueño de la marca David Trainer en la ciudad de Cartagena, que cuenta con un equipo de entrenadores de cuatro personas. 

El negocio de David funciona de manera personalizada y a domicilio, enviando a sus entrenadores a las viviendas de sus clientes que a la última fecha eran aproximadamente 70  personas. A raíz de la crisis sanitaria, digitalizó su negocio y está manejando un formato de entrenamientos virtuales con un aproximado de 8 clases online al día.

De estas clases, una es grupal la cual se realiza en su cuenta de Instagram @_davidtrainer_, la cual está abierta al público, por medio de un Instagram Live.  “Hemos logrado consolidar un grupo bastante fiel de clientes que llevo entrenando, algunos por cinco años, y estoy agradecido de que han estado apoyándonos”. De un promedio de 40 personas que se conectan a la clase grupal en Instagram Live,  un mínimo 30 son clientes activos y otros son personas que ha escuchado del entrenamiento.

Las otras clases que ofrece en el día son personalizadas y se realizan por medio de WhatsApp. En las clases personalizadas, que se realizan por video llamada en WhatsApp se trabaja a la par mostrando el ejercicio y estando pendiente de cómo el cliente lo realiza. Si bien es personalizado, han logrado hacer algunas clases compartidas de hasta dos clientes por llamada.

Indudablemente, se ha visto cómo la tecnología se ha vuelto un aliado para minimizar la interrupción de actividades, al permitir la conexión de las personas, sin importar dónde estén.  Desde Facebook, se estima que desde su lanzamiento, hasta la fecha, se han realizado más de 8.500 millones de transmisiones en Facebook Live, con un crecimiento exponencial en las últimas semanas.