Colombia adelanta un proyecto de interconexión eléctrica regional, que costaría unos US$1.000 millones

Energía

Cinco proyectos por US$700 millones ganaron en subasta de energía

La Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) asignó una capacidad instalada de 572 megavatios para garantizar la confiabilidad en el suministro de energía eléctrica en los próximos años.

28 de diciembre de 2011

El ministro de Minas y Energía, Mauricio Cárdenas, dijo que Colombia cuenta con cinco nuevos proyectos de generación de energía eléctrica para dar confiabilidad al sistema hasta el 2016.

“Se harán inversiones de US$700 millones, con lo que también vendrán grandes oportunidades en términos de empleo para la construcción de estas importantes obras civiles”, destacó el ministro Cárdenas.

La subasta contó con la participación de siete empresas con ocho proyectos que ofertaron 6,25 Teravatios hora-año (TWh-año) de energía firme y una capacidad superior a los mil megavatios.

Los proyectos asignados son Proyecto Hidroeléctrico del Río Ambeima, en el Tolima; Central Hidroeléctrica Carlos Lleras Restrepo y San Miguel, en Antioquia; Gecelca 32 en Córdoba y TermoTasajero II en Norte de Santander.

“De los cinco proyectos asignados, cuatro fueron liderados por el sector privado y otro por una entidad estatal. Además, de los proyectos asignados, uno cuenta con una inversión mayoritariamente extranjera, en particular de un grupo chileno”, explicó el ministro Cárdenas.

Tres de los proyectos corresponden a generación de energía hidráulica, recurso que es renovable y ambientalmente sostenible, mientras que los dos restantes son de energía térmica.

La subasta también le da a Colombia la posibilidad de exportar energía eléctrica hacia otros países como Ecuador, Chile, Panamá y Bolivia, en el marco de la interconexión eléctrica regional que se encuentra en estudios de viabilidad técnica y financiera.

La subasta de energía que culminó este miércoles, se adelantó con el fin de suplir la energía en firme que dejarán de entregar las hidroeléctricas Miel II y Porce IV, que tienen frenada su construcción. También obedeció al fuerte crecimiento de la demanda de energía.