¿Quién quiere ser billonario?

Riesgo:

Los billonarios no rechazan el riesgo pero tampoco son personas riesgosas. Esto quiere decir que en especial se caracterizan por tener actitud positiva frente al riesgo pero lo gestionan y lo mitigan. Entienden que el retorno que pueden obtener al hacer una inversión supone riesgos pero lo saben reducir en formas creativas y diferentes. Con ello dan muestra que son personas inteligentes. Por lo mismo, siempre están atentos en no perderse una oportunidad de obtener rendimientos atractivos y ponen sus capacidades en monitorear esas ocasiones. Luego se centran en cómo pueden adaptar la oportunidad que desean pero ajustarla a escenarios de menos riesgos. En ese sentido, manejan plan B para recuperarse de una perdida.

Focalizados:

Los billonarios son personas curiosas. Muy proactivas. Suelen ser personas que saben escuchar, ponen más atención que el promedio de los altos ejecutivos pues nunca consideran que tienen la información ni que conocen lo suficiente para tomar una decisión. Sin embargo, son especialmente focalizados en detectar necesidades insatisfechas, no para criticar sino por considerar que sugieren oportunidades de negocio. Una vez, ubican una necesidad insatisfecha hacen preguntas que ayuden a determinar donde hay fallos en mecanismos de atención o de satisfacción de los clientes y en ese nivel no se dejan distraer por otros enfoques en la información que les suministran.

Perseverantes:

Suelen ser muy orientados al trabajo duro pero no dejan de ser muy sociables pues su personalidad emprendedora conjuga su capacidad analítica con su parte expresiva. Suelen ser a veces impulsivos pero es un mito que suelen dejar de lado sus estudios. El 82% de ellos tiene grados académicos profesionales, han trabajado antes en grandes empresas, empiezan sus aventuras antes de los 40 años. En su gran mayoría no heredaron sus riquezas sino que las forjaron personalmente. Al menos 6 de los 10 billonarios menores de 40 años han surgido con Sillicon Valey según Forbes en su listado de 2015. Facebook, WhatsApp, Snapshot y Napster son las empresas que más han contribuido a algunas de estas nuevas personalidades.