Las acciones sufrieron un declive masivo el lunes, su primera sesión después de que Estados Unidos perdiera su calificación de crédito máxima de AAA y el índice S&P 500 reportó su peor pérdida de un día desde diciembre del 2008. | Foto: EFE

Mercados

Acciones en EE.UU. cierran con alza en sesión de mucha volatilizad

El índice de acciones estadounidenses S&P 500 ingresó el martes a terreno bajista en el inicio de las operaciones, pero las compras de acciones tecnológicas y otros sectores sobresalientes hicieron que el mercado en general cerrara con una importante alza.

4 de octubre de 2011

Según los últimos datos disponibles, el promedio industrial Dow Jones trepó 151,52 puntos, o un 1,42 por ciento, a 10.806,82 unidades.

El Standard & Poor's 500 subió 24,52 puntos, o un 2,23 por ciento, a 1.123,75 unidades, mientras que el Nasdaq creció 68,99 puntos, o un 2,95 por ciento, a 2.404,82.

Crecientes temores por deuda griega golpean a bolsas europeas
Las acciones europeas cayeron con fuerza el martes y estuvieron cerca de cerrar en su nivel más bajo en 26 meses, porque funcionarios europeos evaluaban exigir a los bancos que asuman más pérdidas por deuda de Grecia y postergaban una crucial ayuda financiera para el país.

Los inversores temen que una moratoria de deuda por parte de Grecia pueda provocar fuertes pérdidas a muchos bancos europeos expuestos al endeudado país y desatar otra crisis bancaria, que a su vez dañaría aún más la frágil recuperación de la economía mundial.

Las acciones de Dexia se derrumbaron hasta un 38 por ciento a mínimos históricos ante temores por la alta exposición del grupo financiero franco-belga a la deuda griega. Los papeles cerraron con una pérdida del 20,4 por ciento, pese a promesas oficiales de respaldo.

El sector bancario europeo, que perdió un 4 por ciento, estuvo entre los de peor desempeño luego de que 17 ministros de Finanzas reunidos en Luxemburgo pidieron una revisión del acuerdo de canje de bonos griegos con inversores privados. El sector bancario se ha hundido un 36,4 por ciento en el año.

"Los mercados están nerviosos porque hay mucha incertidumbre política. Mientras no encontremos una solución para la situación en Grecia, el escenario seguirá siendo un desafío", dijo Klaus Wiener, economista jefe de Generali Investments.

"No hay una solución sencilla para un problema que se ha desarrollado durante tantos años. Por un lado, uno puede decir que hay que dar el dinero necesario para los países con niveles más altos de deuda. Al mismo tiempo, están los problemas de Gobierno. Hay que buscar un equilibrio delicado", agregó.

En tanto, Goldman Sachs resaltó el duro panorama económico al rebajar su pronóstico de crecimiento para las economías avanzadas en el 2012 a 1,3 por ciento desde el 2,1 por ciento previo.

El índice FTSEurofirst 300 de las principales acciones de la región cerró con un descenso del 2,7 por ciento a 887,77 puntos, tras llegar a perder hasta un 4 por ciento durante la sesión a un mínimo de una semana.

El índice tocó un mínimo de 26 meses a fines de septiembre y hasta hoy acumula una caída de casi el 21 por ciento en lo que va del año.

El índice de las principales acciones de la zona euro Euro STOXX 50 cayó un 2,2 por ciento a 2.091,09 puntos.

Las acciones europeas recortaron pérdidas brevemente luego de que el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, dijo que el banco central está preparado para tomar más medidas que ayuden a que la débil recuperación económica no naufrague.

Pero pronto regresó la cautela. Varios indicadores mostraron que los inversores seguían nerviosos. El índice de volatilidad Euro STOXX 50, principal indicador del miedo de los inversores europeos, subió un 3,7 por ciento a máximos de tres semanas, sugiriendo una falta de apetito por el riesgo.

Uno de los sectores que cayó con fuerza fue el de construcción y materiales, que perdió un 4,2 por ciento.

Las acciones de la cementera Lafarge perdieron un 8,5 por ciento y las de HeidelbergCement un 9 por ciento, luego de que la mexicana Cemex tocó un mínimo de 13 años por preocupaciones ante el desaceleramiento del crecimiento en Europa y Estados Unidos.

El sector automotor perdió un 6,2 por ciento, por la preocupación por las perspectivas de demanda de vehículos.