El transporte aéreo en Suramérica recupera este jueves poco a poco la normalidad de sus operaciones.

Aviación

Transporte aéreo afectado por ceniza volcánica recobra poco a poco normalidad

El transporte aéreo en Suramérica recupera este jueves poco a poco la normalidad de sus operaciones, luego de verse afectado nuevamente en esta semana por los efectos de las cenizas arrojadas desde hace 12 días por el complejo volcánico chileno Puyehue-Cordón Caulle.

16 de junio de 2011

En Chile, los vuelos con destino a Argentina y Uruguay despegaron este jueves como estaba previsto desde Santiago, aunque la aerolínea Lan suspendió una operación que hace escala en Nueva Zelanda y tiene como destino final Australia, hasta donde ha llegado la nube volcánica, tras recorrer unos 9.400 kilómetros de distancia.

También las aerolíneas Sky Airlines, Aerolíneas Argentinas y Pluna operaron sus vuelos a Buenos Aires y Montevideo y mantienen programados para esta tarde los viajes a esos mismos destinos, según informa el aeropuerto en su página web.

En Argentina, desde ayer mismo el aeropuerto para vuelos locales y regionales de Buenos Aires comenzó a normalizar sus operaciones, tras verse afectadas desde el pasado domingo por la nube de cenizas del Puyehue-Cordón Caulle.

Las operaciones en el aeropuerto internacional de Ezeiza, el principal de Argentina y situado a las afueras de la capital, ya se habían regularizado en la noche del martes, aunque gran parte de los aeropuertos del sur de Argentina, los más cercanos al complejo volcánico, permanecen cerrados desde el pasado día 4, cuando se inició la erupción volcánica.

Por su parte, el Aeropuerto Internacional de Carrasco (AIC), de Montevideo, registra plena normalidad en sus operaciones después de que el tráfico aéreo se viera afectado durante los últimos diez días en varias ocasiones por las cenizas y el humo del Puyehue-Cordón Caulle, informó hoy la terminal.

Jorge Bentos, jefe de operaciones terrestres de Puerta del Sur, la empresa concesionaria del AIC, el principal aeropuerto del país, explicó que por el momento no se prevén nuevas cancelaciones de vuelos, pero la situación está supeditada a la dirección de los vientos, que movieron la ceniza hasta el cielo de Uruguay.

En Brasil, las aerolíneas locales normalizaron desde el miércoles sus vuelos con destino o procedentes de Buenos Aires y Montevideo, gracias a la apertura de los aeropuertos de esas dos capitales.

Las compañías aéreas se esfuerzan ahora por embarcar a quienes perdieron sus vuelos lunes y martes, mientras que la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) informó que la nube de cenizas volcánica perdió significativamente intensidad y que los restos que permanecen están por debajo de las altitudes utilizadas por las aeronaves, por lo que no hay peligro para las operaciones aéreas.

Perú, que el lunes igualmente tuvo que interrumpir los vuelos desde Lima a Buenos Aires y Montevideo, anunció que estos operan desde hoy con total normalidad. Sin embargo, una de las aerolíneas mantiene cancelado desde ayer uno de sus vuelos, cuyos pasajeros están siendo transferidos a otros aviones.

También en Paraguay los vuelos internacionales hacia y desde Asunción se normalizaron hoy en su totalidad tras la suspensiones registradas a comienzo de esta semana, según informó a Efe el administrador del aeropuerto asunceno Silvio Pettirossi, Rubén Aguilar.

Destacó que no ha habido nuevos problemas en las operaciones de esta terminal aeroportuaria y que los efectos de la nube de cenizas volcánicas afectaron en un 90 % los vuelos locales la semana pasada y en un 50 % las operaciones del lunes y martes últimos.

En Bolivia, los vuelos hasta Chile y Argentina fueron normalizados, después de casi diez días de suspensiones y retrasos, según informaron los aeropuertos de Santa Cruz (este) y El Alto (La Paz), los principales del país.

Por último, en la lejana Oceanía el tráfico aéreo comenzó a restablecerse parcialmente este jueves pese al caos en el que permanecen los aeropuertos de Nueva Zelanda y Australia tras cinco días de cancelaciones causadas por la nube de ceniza del complejo volcánico chileno.

 

 

 

 

Efe