Elecciones EE.UU.

¿Obama una desilusión?

Al actual presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, se le critica duramente la poca capacidad de maniobra que ha utilizado para empujar la economía del país más poderoso del mundo.

6 de noviembre de 2012

Hace cuatro años cuando el candidato demócrata Barack Obama se enfrentaba al republicano John McCain, la percepción entre analistas y la gente, era que Obama estaba más preparado para alentar la economía estadounidense que en 60 años no había mostrado resultados tan pobres como la de los dos últimos años de George W. Bush.

Actualmente aunque la recuperación viene presentándose no supera el 2% del crecimiento del Producto Interno Bruto, y el desempleo no ha logrado disminuirse al menos al 6%.

Esas dos cifras son las que han ensombrecido la ejecución de Obama al frente del gobierno más poderoso de la política internacional, sin embargo el mandatario ha insistido en que si le dan otra oportunidad podrá mejorar esos números.

Sin embargo, la situación no es tan fácil, en el mundo globalizado lo que pasa en China y Europa afecta a los Estados Unidos y viceversa y las proyecciones para 2013 no son favorables para ninguno de esos tres territorios, muchos analistas consideran que podrían crecer menos de lo que crecieran en 2012.

Menos poder

Como líder carismático Obama es un éxito, pero no es garantía que sea tomado como un buen gobernante, al presidente se le critica por ser excesivamente tímido y condescendiente con algunos regímenes que se han afianzado en otros países durante los últimos cuatro años.

Hay un sector interno en Estados Unidos tanto de republicanos como de demócratas que le exige la gobierno retomar y recuperar el terreno perdido en América Latina y acusan tanto a Obama como a Bush de haber permitido que se hayan instaurando regímenes como el de Hugo Chávez e n Venezuela, los Kirchner en Argentina, Evo Morales en Bolivia, y Rafael Correa en Ecuador.
 
Pero Obama ha tenido la peor parte en este escenario, porque los mandatarios de los mencionados países son quienes más han aprovechado para evidenciar que Estados Unidos ya perdió influencia en sus naciones.

En Oriente

En cuanto al conflicto árabe israelí, hay un sector conservador en Estados Unidos que considera que Obama ha tomado una distancia malsana del régimen de Tel Aviv en Israel, un aliado muy fuerte de hace más de 60 años.

Otros lo consideran indulgente con Irán y lo tildan de muy débil por no poner en cintura al gobierno de ese país que tiene quizás el arsenal nuclear más grande del mundo.

También lo critican de haber transigente con el régimen de Pio Yang en Corea del Norte y haberle permitido convertirse en un intocable.

Con todas esas montañas de críticas Obama sin embargo está pidiendo cuatro años más.