Nació un 'pobre' bebecito

Lionel Messi se convirtió en padre este viernes con el nacimiento de su primogénito Thiago en el hospital USP Dexeus de Barcelona.

El asunto se ha convertido en el tema de interés mundial. Y con razón. El jugador argentino no solo ha sido considerado el mejor del mundo, sino que se ha convertido en una verdadera fábrica de dinero dentro y fuera de la cancha.

El pase del jugador está tasado en US$183 millones y su interés supremo es seguir batiendo récords en goles y cheques. Lo curioso de Messi es que hace 10 años nadie daba un peso por él y hasta tuvo que tomar hormonas de crecimiento para lograr un puesto en el afamado pero excluyente fútbol argentino.

Al año se embolsilla 33 millones de euros, unos $77.000 millones. En otras palabras, este rosarino gana en un día $211 millones, el mismo salario del presidente de la República, Juan Manuel Santos, pero en un año.

Sus cifras en publicidad son asombrosas, pues es la imagen exclusiva de grandes marcas como Air Europa, Danet, Adidas, Master Card y Pepsi, entre otras. Según la clasificación de la revista France Football, Messi gana 10,5 millones de euros (875.000 euros mensuales) de salario, 1,5 millones de euros en primas y 21 millones por publicidad y otros conceptos.

Todo lo anterior permite deducir que Thiago no solo es de los hijos más envidiados del mundo, sino que literalmente, como dice el adagio popular ‘vino con el pan debajo del brazo’.