El peso colombiano, que quedó estable la semana pasada en 1.784 unidades por dólar, podría ser favorecido por la entrada de capitales, aunque seguirá moviéndose de la mano del desempeño de las plazas externas.

Proyecciones

Monedas América Latina luchan contra apreciación

La mayoría de los países latinoamericanos seguirá combatiendo la apreciación de sus monedas esta semana, en un mercado que analiza el acuerdo de último momento alcanzado el domingo en Estados Unidos para evitar una moratoria de deuda.

1 de agosto de 2011

Tras meses de áspera discordia, legisladores republicanos y demócratas votarán el lunes un acuerdo apoyado por la Casa Blanca para elevar el techo de endeudamiento de Estados Unidos y recortar unos 2,5 billones de dólares del déficit en los próximos 10 años, que de ser aprobado permitiría evitar una moratoria sin precedentes.

Pero pese al acuerdo, siguen los temores a que el dólar pierda paulatinamente su rol como divisa de reserva.

A nivel global, el dólar se debilitaba el lunes un 0,2 por ciento frente a una cesta de monedas principales.

Ante ello, Latinoamérica viene adoptando duras medidas para aliviar el impacto de un dólar débil sobre el tipo de cambio --incluyendo compras de dólares y regulaciones al ingreso de capitales especulativos--, logrando en algunos casos limitar la apreciación de su moneda.

Un informe de Barclays Capital Research dijo que es probable que Brasil y Colombia se mantengan muy activos en su lucha para evitar la apreciación de sus monedas, dijo un informe de Barclays Capital Research.

No obstante, "en México, Perú y Chile, por el otro lado, el riesgo de medidas similares para limitar la apreciación de sus divisas parece limitado de alguna manera", según Barclays.
El peso mexicano se apreciaba el lunes en las operaciones previas a su apertura oficial, impulsado por la noticia de que los congresistas de Estados Unidos alcanzaron un acuerdo de último minuto para reducir el déficit y evitar una moratoria.
La moneda mexicana cotizaba en 11,6650 pesos por dólar, con una ganancia del 0,52 por ciento frente a los 11,7260 pesos del precio de referencia de Reuters del viernes.

En un escenario de que se aprobaría un mayor endeudamiento en Estados Unidos, el analista Mario Copca, de VCB Casa de Bolsa en México dijo que seguirá la fuerte volatilidad en el mercado mexicano, especialmente el cambiario, por la estrecha relación comercial que tiene ese país con Estados Unidos.
Por su parte, Brasil ha tomado acciones desde el año pasado para frenar el alza del real, que está erosionando la competitividad de su industria. Las medidas han sido infructuosas.

El viernes, el Banco Central de Brasil ofreció una segunda subasta para comprar dólares en el mercado de cambios a la vista, en el marco de sus esfuerzos por acumular reservas internacionales y absorber el fuerte flujo de divisas estadounidenses a la plaza local.

"El mercado está escaso de compradores. No hay nadie queriendo comprar dólares, solamente el Banco Central", dijo José Carlos Amado, un operador de cambios de la correduría Renascença.

El lunes, la moneda brasileña, el real, se fortalecía un 0,15 por ciento en el mercado spot local a 1,5476 unidades por por dólar.

Intervenciones

Esta constante apreciación del real es lo que ha permitido, según algunos analistas, que el REER (siglas en inglés para tipo de cambio real efectivo) de su socio y vecino argentino no se aprecie más.

"Considero que el BCRA (Banco Central de la República Argentina) va a seguir interviniendo, vendiendo dólares, para que la depreciación del peso sea lo más gradual posible", dijo Boris Segura, director ejecutivo para América Latina de Nomura Securities International en referencia a la participación firme de la autoridad monetaria en el mercado cambiario.

Pese a las ventas de dólares del Banco Central para abastecer al mercado, el peso argentino interbancario está en mínimos históricos de 4,145 unidades por dólar y el informal, en torno a 4,34 pesos por unidad.

La entidad monetaria argentina vendió la semana pasada unos 240 millones de dólares para evitar una mayor caída de pesos.

En Colombia, el peso, que el 15 de julio tocó su nivel más alto en tres años frente al dólar, cerró el viernes en 1,779 unidades por dólar, una caída del 0,34 por ciento, rompiendo la línea de tendencia que tenía desde marzo.

El Gobierno del presidente colombiano Juan Manuel Santos dijo esta semana que estaba comprometido a tomar medidas contra la revaluación del peso colombiano que está perjudicando a los exportadores de ese país.

"Es altamente probable que el tipo de cambio del peso colombiano frente al dólar sufra de un estrangulamiento de liquidez en los próximos meses similar al del cuarto trimestre del 2010, cuando fue depreciado en un 13 por ciento", dijo en una nota Benito Berber de Nomura Securities.

Sin embargo, en una reunión el viernes el Banco Central de Colombia no adoptó medidas cambiarias para suavizar el ritmo de apreciación del peso.

La semana previa, las monedas latinoamericanas fueron sometidas a la incertidumbre que causó la falta de acuerdos en el diálogo entre legisladores estadounidenses para elevar el límite legal de endeudamiento de Estados Unidos y evitar que ese país caiga en una devastadora moratoria del pago de deuda.

El peso chileno abrió el lunes con un importante avance frente al dólar, favorecido por la debilidad global de la moneda estadounidense.

"El dólar se está debilitando a nivel global, ese es por ahora el principal fundamento que está impulsando al peso en la apertura", dijo un operador en Chile.

El tipo de cambio spot cotizaba a 455,50/456 pesos, con un alza del 0,48 por ciento.