Austria, Finlandia y Holanda - junto con Alemania - se encuentran entre el grupo de estados de la zona euro que tiene una evaluación crediticia de AAA concedida por dos o más de las importantes agencias calificadoras de riesgo.

Crisis Financiera

Los "pequeños" de la Unión Europea discuten su futuro

Los países más pequeños de la zona euro que conservaron altas calificaciones de crédito durante la crisis de deuda de la región discutieron sobre si atribuladas naciones como Grecia, deberían ser expulsadas de la UE.

17 de agosto de 2012

Políticos de alto nivel de Austria y Finlandia insistieron que están comprometidos a mantener intacta la unión del bloque, pese a que ministros de pequeños partidos de la coalición dijeron que se están preparando para disolverlo o que pidieron que los países que incumplieron sus promesas sean desvinculados de la Unión Europea.

Los mensajes mixtos contrastaron con una muestra de solidaridad por parte de la política más poderosa de Europa Occidental, la canciller alemana Angela Merkel, que alentó las expectativas entre los inversores de que el bloque finalmente estaría controlando sus problemas.

En declaraciones en Ottawa, Merkel dijo que los comentarios del presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, que el mes pasado prometió hacer lo necesario para salvar al euro, estaban "completamente en línea" con la postura adoptada por los líderes europeos.

En Viena, el canciller austriaco, Werner Faymann, dijo que no le gustaría que ningún país sea separado de la zona euro.

"Las consecuencias negativas de una disolución de la zona euro pesarían mucho más que cualquier ventaja para los países individuales", dijo Faymann, luego de que su vicecanciller llamó a poner en marcha un mecanismo para expulsar a las naciones que incumplan con sus promesas financieras.

En Helsinki, el ministro de Asuntos Europeos, Alexander Stubb, dijo que Finlandia estaba "comprometida al 100 por ciento" con el euro, después de que su ministro del exterior dijo al diario británico Daily Telegraph que funcionarios se habían preparado para el eventual colapso de la moneda única.

Holanda, que en el pasado instó a que la Unión Europea cuente con poderes para expulsar a países del bloque, dijo el viernes que su atención está centrada en mantener intacta a la UE.

"Nunca especulamos sobre la salida (de un país) del bloque, o la desintegración de la zona euro", dijo el ministro de Finanzas Jan Kees de Jager a la prensa.

Austria, Finlandia y Holanda - junto con Alemania - se encuentran entre el grupo de estados de la zona euro que tiene una evaluación crediticia de AAA concedida por dos o más de las importantes agencias calificadoras de riesgo.

La población de los cuatro países está cada vez más frustrada con lo que consideran rescates financieros injustos de estados más débiles.

En los tres estados más pequeños, esto ha alentando el aumento en la popularidad de los partidos de extrema derecha y escépticos al euro que prometen detener entregas de ayuda financiera potencialmente ilimitadas.

El vicecanciller de Austria, Michael Spindelegger, dijo en una entrevista a la prensa que otros países económicamente fuertes como Alemania, Luxemburgo, Finlandia y Holanda darían apoyo a un mecanismo para expulsar a países del bloque.

El Gobierno alemán declinó hacer comentarios.

Es sabido que existe un desacuerdo al interior de la coalición de centro-derecha de Merkel respecto al asunto.

El propio partido de Merkel, la Unión Demócrata Cristiana (CDU), está en contra de expulsar a los estados miembros del bloque, pero acordó el año pasado que las naciones deberían ser capaces de elegir si abandonan la Unión Europea si no pueden, o no quieren, mantener en orden sus finanzas. 


Reuters