Foto: AP - Se temen inundaciones en el distrito financiero. | Foto: AP

Desastres Naturales

Irene azota los rascacielos de Nueva York

Los rascacielos de Nueva York se ven azotados por furiosos vientos y una torrencial lluvia, con el huracán Irene impactando en pleno en la metrópoli.

Alianza BBC
28 de agosto de 2011

El caudal de los ríos que rodean la isla de Manhattan, el East River y el Hudson, rebasa ya las orillas y se teme que el distrito financiero se vea afectado.

El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC por sus siglas en inglés) indicó que seguirá lloviendo de forma muy intensa en las próximas horas, lo que aumenta los temores de que se produzcan inundaciones.

La red de transporte público ha sido suspendida y el alcalde de la ciudad dijo que ahora era demasiado tarde para irse.

Irene llegó a Nueva York a última hora del sábado. Unas 300.000 personas que viven en las zonas de mayor riesgo habían recibido órdenes de evacuación

"La parte externa del huracán ya está sobre nosotros", avisó el alcalde Michael Bloomberg en una rueda de prensa.

"El tiempo para evacuar se acabó. En este momento, si no has evacuado, nuestra sugerencia es que te quedes donde estás. La naturaleza es mucho más fuerte que el resto de nosotros", dijo Bloomberg.

Alerta en Wall Street

La tormenta comenzó a afectar al río Hudson, lo cual potencialmente podría causar inundaciones en el distrito financiero.

En Wall Street, se colocaron costales de arena alrededor de las entradas al metro y el trabajo de construcción está detenido en toda la ciudad.

La fuerza de sus vientos es, según el último informe meteorológico, de 120 kilómetros por hora.

Irene ya pasó por Carolina del Norte y Virginia causando daños y la muerte de al menos ocho personas.

La tormenta fue degradada de un huracán de categoría 3 cuando pasó a través el Caribe la semana pasada a categoría uno, pero aún se espera que sea destructiva.

Patricia Billinger, de la Cruz Roja en EE.UU., dijo a la BBC, que unas 27.000 personas han tomado refugio en albergues en toda la costa este.

Huracanes de esta magnitud son raros en esta costa de Estados Unidos. Las últimas tormentas de fuerza similar que llegaron al área fueron el huracán Bob, en 1991, y el huracán Gloria, que causó extenso daño en Nueva York en 1985.