El gobierno de Nicolás Sarkozy reconoció que sus previsiones habían sido excesivamente optimistas.

Crisis financiera

Francia reduce meta de crecimiento y anuncia plan de austeridad

El Gobierno francés decidió hoy aumentar la presión fiscal con la creación de un nuevo impuesto del 3 % sobre quienes perciban más de 500 mil euros anuales, y anunció un plan de austeridad de 11.000 millones de euros (US$ 16.000 millones) para reducir el déficit presupuestario.

24 de agosto de 2011

París — Los pronósticos de crecimiento económico de Francia fueron excesivamente optimistas, admitió el miércoles el gobierno del presidente Nicolas Sarkozy. El nuevo impuesto "se trata de una imposición excepcional cuya duración fijamos hasta que se alcance el objetivo del 3 % de déficit. Cuando lleguemos a ese objetivo (programado para 2013), la medida será suprimida", explicó el primer ministro François Fillon.

El impuesto es parte de un plan de reducción del gasto. El plan consiste mayormente en eliminar las exenciones fiscales y otras deducciones para las mayores empresas del país. Empero, incluyó además un aumento fiscal de 200 millones de euros a los franceses más acaudalados mediante la "contribución excepcional" del 3% a los ingresos superiores a los 500.000 euros.

El plan fue anunciado dos semanas después de que Francia fue criticada por los inversionistas, temerosos tanto del cuantioso endeudamiento soberano y el monto del déficit, como de su participación en el rescate de ciertos países europeos al borde de la quiebra, como Grecia.

Fillon dijo que el plan de austeridad es vital para cumplir su promesa de la reducción del déficit y mantener su calificación crediticia máxima, de AAA. Culpó a la recesión internacional por la imposibilidad de Francia de crecer este año un 2%, como había pronosticado hace una semana el ministro de Hacienda Francois Baroin.

El país crecerá seguramente este año sólo un 1,75% y la misma cantidad en 2012. El gobierno había elaborado su presupuesto de 2012, un año crítico para Sarkozy, sobre la base de un crecimiento del 2,25%.

Fillon dijo que las medidas asegurarán que Francia cumpla su promesa ante sus socios europeos y los tenedores de sus bonos soberanos por 1,6 billones de euros de reducir el déficit al 5,7% este año del 7,1% en 2010. Además, Francia está decidida a reducir su deuda por lo menos al 4,6% del PIB en 2012 y el 3% en 2013, sin consideración al crecimiento económico.

La iniciativa anunciada se produce un día después de que dieciséis de las mayores fortunas francesas pidieran al Gobierno que les imponga un impuesto especial para contribuir a salir de la crisis que vive el país.

Entre los firmantes figuran el presidente de L'Oreal y su máxima accionista, los patrones de la petrolera Total, el grupo hotelero Accor, el alimentario Danone, el banco Société Générale, el operador de comunicaciones Orange, la aerolínea Air France-KLM y el fabricante automovilístico PSA Peugeot-Citröen.

Los acaudalados franceses que suscriben la petición se suman así a las declaraciones de algunos multimillonarios que, a título personal, habían expresado en sus últimos días su deseo de contribuir de manera excepcional al erario público, siguiendo la senda marcada en Estados Unidos por el magnate Warren Buffett.


EFE