Correa consideró conveniente analizar la continuidad de su país en ese organismo que, agregó, "sirve para muy poco", aunque precisó que su posición no obedece a "esta coyuntura". Señaló que la CAN fue "golpeada de muerte" con la firma de tratados de libre comercio con Estados Unidos por parte de Colombia y Perú. | Foto: Efe

Comercio

A Ecuador ya no le suena la CAN

El presidente de la Cámara de Comercio de Quito, Blasco Peñaherrera Solah, consideró que el abandono de Ecuador de la Comunidad Andina (CAN) sería un "error garrafal".

11 de febrero de 2015

Se pronunció así después de que el jefe de Estado, Rafael Correa, dijo que se debe "analizar seriamente" la continuidad del país en la CAN, bloque que la pasada semana emitió una resolución contraria a las medidas de protección comercial aplicadas por el país a sus vecinos Colombia y Perú.

"Sería un error garrafal que profundizaría aún más el aislamiento en el que vive nuestro país, gracias a la errática conducción de la política comercial y exterior del Presidente Correa y su Gobierno", indicó Peñaherrera, según un comunicado de la Cámara de Comercio.

Añadió que en "cualquier momento, pero ahora más que nunca, cuando las exportaciones deben ser una prioridad nacional para disminuir el déficit en la balanza comercial, salir de la CAN es una decisión que ni siquiera se debería considerar".

"Las políticas públicas deben ser analizadas con detenimiento, profundidad y siempre basadas en aspectos técnicos y no pueden estar motivadas por caprichos personales, rabietas o revanchismo. La CAN es el único mercado preferente para Ecuador y ha generado desde su creación más de 20.000 millones (de dólares) de intercambio comercial sano entre los países andinos", mencionó.

El Gobierno de Ecuador impugnó el pasado domingo una resolución de la CAN, que le exigió eliminar una salvaguardia aduanera impuesta a importaciones de Colombia y Perú por las devaluaciones monetarias en esos países, que afectan la competitividad de las exportaciones nacionales. Ecuador rechazó la resolución al considerar que "excede las competencias que le confiere el Acuerdo de Cartagena", instrumento de fundación de la Comunidad.

En un encuentro con periodistas en Guayaquil, Correa consideró conveniente analizar la continuidad de su país en ese organismo que, agregó, "sirve para muy poco", aunque precisó que su posición no obedece a "esta coyuntura". Señaló que la CAN fue "golpeada de muerte" con la firma de tratados de libre comercio con Estados Unidos por parte de Colombia y Perú. Sobre la resolución impugnada, Correa dijo que lo que ha hecho Ecuador "está contemplado en el marco de la CAN" y añadió que se presentarán "las quejas del caso".

La Secretaría de la CAN, con sede en Lima, al desautorizar la aplicación de la salvaguardia por parte de Ecuador, le recomendó devolver el importe de ese pago aduanero a las empresas afectadas.

Según el Gobierno ecuatoriano, a la Secretaría de la CAN no le está conferida la posibilidad de "emitir dictámenes no vinculantes en materia de salvaguardia cambiaria", ya que solo puede reflejar "exclusivamente la posición institucional sin generar efectos mandatorios para los países miembros". Además, sostiene que "las normas y jurisprudencia andinas reconocen el derecho de Ecuador a proteger su economía frente a depreciaciones monetarias efectuadas por otros países miembros de la CAN, que alteren las condiciones de competencia".

El Gobierno ecuatoriano ratificó que la medida aduanera, adoptada el pasado 5 de enero, cuando fijó una salvaguardia del 21 por ciento a las importaciones de Colombia y 7 por ciento a las de Perú, "es plenamente justificada". Además, ratificó que Ecuador "respetará los resultados de las negociaciones y compromisos asumidos con Colombia y Perú y, en tal sentido, continuará evaluando la posible sustitución de la salvaguardia cambiaria por otras medidas de carácter multilateral, igualmente legítimas".

El Gobierno de Ecuador anunció el pasado jueves su intención de desmontar las salvaguardias impuestas a Colombia y Perú, como consecuencia de unos diálogos directos que mantuvo con esos dos países, por separado, y que terminaron con acuerdos entre las partes.


Efe/D.com