El desplome de la demanda de materias pimas de China, es catalogado como el estallido de la burbuja de los precios de estas, pero además representa un redireccionamiento de demanda hacia bienes de consumo más que bienes de industrialización masiva, que usualmente experimentan países que se enriquecen. | Foto: Bloomberg

Destacados 2015

¿Qué hay detrás del desplome de la demanda de materias primas de China?

Los países emergentes que concentran su economía en la comercialización de materias primas en el mercado mundial están atravesando una época de vacas flacas por el desplome de la demanda de China entre otras variables, sin embargo, Goldman Sachs vislumbra un cambio estructural en la demanda de materias primas en China.

21 de octubre de 2015

De acuerdo con el portal en línea de negocios, Business Insider, el desplome de los precios de las materias primas está enviando señales a través del mundo, especialmente a los mercados emergentes.

Los países en las que la economía está en función de la extracción de recursos y las exportaciones de los productos básicos se han topado con “un muro de ladrillo” durante este año, luego del derrumbe de las materias primas fundamentales para el funcionamiento de la industria tales como el petróleo, gas, carbón, oro, plata, cobre entre otros.

Por lo anterior, la estabilidad macroeconómica de estos países se está viendo en juego sobre todo para las economías relativamente menos diversificadas en su base exportadora y por ende, dependientes de la comercialización de productos básicos.

De acuerdo al análisis de Business Insider de la coyuntura económica, el mundo ha observado una fuerte pérdida de valor con respecto al dólar estadounidense desde Asia hasta Occidente sobre todo en mercados emergentes exportadores de materias primas, entre ellos Rusia, Brasil, Colombia, México, Nigeria e Irak, entre muchos otros; monedas que ya se encontraban bajo presión antes de la devaluación de China que puso de relieve la debilidad de los mercados emergentes.

El boom de las materias primas


Sin embargo, los precios de las materias primas estaban en un auge, que según Business Insider había comenzado hace más de una década cuando el crecimiento de China y por lo tanto de su demanda de commodities para la industria, impulsó la inversión en la producción de productos básicos y en la planificación de proyectos de extracción de recursos en todo el mundo.

Durante los últimos 10 años  “se capitalizó más de US$745.000 millones en inversión para petróleo, gas y proyectos mineros, mientras que la cifra alcanzó su punto máximo entre 2008 y 2009 cuando los proyectos relacionados con petróleo y minería representaron ente el 10 y 12% de la inversión extranjera directa total en el mundo”.

Sin embargo, hoy la historia es diferente, pues los incentivos que tuvieron los inversionistas en la extracción de materias primas dado el auge del gigante de Asia y los altos precios de estas en el mercado internacional, ahora no son suficientes con el estallido de “la burbuja de los precios de los commodities”.

Al parecer la demanda de commodities para la industria podría atravesar un giro sustancial en el mundo pues la demanda de materias primas del gigante asiático se está redireccionando hacia las materias primas de consumo, de acuerdo con Goldman Sachs.

Cambio estructural en la demanda de materias primas en China

Goldman Sachs, asegura que la demanda de materias primas por parte de mercados emergentes, entre ellos, el mercado de China, han impulsado la subida de precios de las materias primas en la última década, como lo afirma también Business Insider, conduciendo a la sobreoferta que los mercados internacionales experimentan actualmente, en donde los precios han estado buscando un “nuevo equilibrio más bajo”.

De acuerdo al análisis de Goldman Sachs, la economía china está experimentado un rebalanceo en el mercado de commodities pues está creciendo la demanda de materias primas como la energía y metales basados en el consumo como el aluminio y se está reduciendo la demanda de commodities como cemento, acero y mineral de hierro, los cuales son necesarios para la industrialización masiva, mientras que la demanda de materias primas destinadas al consumo como gasolina y café están creciendo.

De acuerdo con Goldman Sachs, lo anterior representa un reequilibrio en la demanda de materias primas, anteriormente observado en países que comienzan a volverse más ricos.

Goldman Sachs argumenta que China se encuentra en un nivel de ingresos medio alto, con un PIB per cápita de US$7.600, y a su vez el trabajo previo realizado por economistas asociados a Goldman Sachs “Global Economics Paper 220: What the World Wants”, sugiere que con un PIB per cápita entre US$5.000 y US$12.000, las economías entran en su última etapa del crecimiento de la demanda de materias primas de “necesidad básica” como el trigo, mientas que la demanda por carne, energía entre otros, empieza a aumentar en la medida en que crecen los ingresos de la población.

Pese a que es un cambio estructural de la demanda lento, con el tiempo, el consumo se traslada a bienes de lujo, viajes y otros servicios.

El estudio de Goldman Sachs concluye que el pico del crecimiento de la demanda de metales industriales y otros commodities utilizados para “el gasto del capital en China terminó al tiempo que el periodo de crecimiento económico a partir de la inversión y las exportaciones,” dándole paso al crecimiento económico a través del consumo.

Por otro lado, Business Insider asegura que Beijing está tratando de que la economía gire lejos en torno a la inversión y de la industria impulsada por las exportaciones y más bien que ésta sea impulsada por el consumo y los servicios. “Así es como el país dejará de estar atrapado en la trampa de ingresos medios; que es lo que los políticos esperan”.