Chávez seguirá nacionalizando monopolios

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, dijo el martes que seguirá nacionalizando monopolios empresariales en el país como parte de su proyecto socialista, asegurando que pondrá el pie en el acelerador para profundizarlo.

4 de agosto de 2009

El mandatario afirmó que dos empresas venezolanas procesadoras de café que fueron intervenidas temporalmente el lunes pasarán a "manos del pueblo", tal y como ha sucedido con otras firmas expropiadas o declaradas de utilidad pública.

El militar retirado emprendió hace dos años una ola de estatizaciones en sectores claves como el petrolero, cementero, siderúrgico, de telecomunicaciones y electricidad que estaban en manos de inversionistas extranjeros, pero también ha ordenado la expropiación de miles de hectáreas de tierras y empresas de alimentos.

"Vamos a seguir nacionalizando monopolios para convertirlos en empresas productivas en manos de los trabajadores, en manos del pueblo, en manos de la revolución", dijo en un acto militar en el que estaban los jefes de todos los poderes públicos.

El Gobierno ocupó temporalmente el lunes las procesadoras de café Fama de América y Café Madrid, las mayores del país, argumentando que la medida busca garantizar esa bebida a los ciudadanos, en momentos que se había advertido sobre futuros problemas de abastecimiento.

Funcionarios advirtieron que estas compañía podían ser expropiadas si habían cometido irregularidades, pero el mandatario anunció el traspaso de la propiedad de ambas firmas, que dominan el 80 por ciento del mercado.

"Hemos intervenido esas grandes empresas y estamos haciendo el estudio para expropiarlas, van a pasar a ser propiedad del pueblo, propiedad de la nación", dijo Chávez vestido de militar en un acto celebrado en una barriada pobre de Caracas.

Las empresas dijeron que sus compras de café verde durante la cosecha 2008/2009 eran inferiores a las del año previo por las dificultades de conseguir el producto y negaron haber incurrido en contrabando de extracción hacia Colombia.

El comandante, como le dicen sus fervientes seguidores, aprovechó una vez más para atacar al modelo capitalista y defender su proyecto político y económico, que la oposición dice busca llevar al país hacia un modelo comunista cubano.

"Así se los digo: voy a seguir metiendo el acelerador de la revolución bolivariana, es mi papel, es mi tarea, no hay tiempo que perder", enfatizó.

Chávez aseguró que han arreciado los ataques y las amenazas a su gestión desde "la oligarquía", a la que acusa de usar los medios de comunicación para manipular la mente del pueblo.

Al mismo tiempo afirmó que en Venezuela existe libertad de prensa, luego de que temores de restricciones en el sector revivieron en los últimos días tras el cese de transmisiones de más de una docena de emisoras de radio tras una orden de su Gobierno el fin de semana.

Mientras las autoridades afirman que estos medios no cumplieron requisitos para seguir con las concesiones, la oposición sostiene que se trata de una medida para acallar la disidencia y las denuncias sobre la gestión gubernamental.

Adicionalmente, la Fiscal de país había presentado un proyecto de ley sobre "delitos mediáticos" que establecía penas de prisión para periodistas y dueños de medios y, aunque estaba previsto que comenzara a discutirse en la Asamblea Nacional el martes, legisladores desmintieron su existencia como plan a evaluar por el legislativo.

Dentro del plan para profundizar la "revolución", la Asamblea Nacional prepara un paquete de leyes "socialistas" para reformar el modelo educativo, la propiedad privada, así como para regular las ventas de vehículos y viviendas.

 

 

Reuters