José Luis Cortés Perdomo, socio de Cortés, Romero y Asociados Abogados.

ABOGADOS

Reformas al Código Sustantivo del Trabajo, una necesidad

La firma Cortés, Romero y Asociados Abogados, advierte sobre que es indispensable una normatividad laboral que no solo se adapte la “nueva realidad” sino que también sea una herramienta para las relaciones empresariales en cualquier coyuntura.

7 de agosto de 2020

La crisis generada por la pandemia de la COVID-19 ha dejado al descubierto las falencias en los diferentes sectores de la sociedad, y la legislación laboral no ha sido ajena a ello. La nueva normalidad que regirá una vez se supere la crisis, exige modelos reformas para el más reciente escenario e incluso prepararlo para este tipo de situaciones en el futuro.

José Luis Cortés Perdomo, socio de Cortés, Romero y Asociados Abogados, una de las firmas boutique más reconocidas en derecho laboral, con más de 2 décadas de experiencia en el manejo y la asesoría de organizaciones públicas y privadas, asegura que evidentemente con todo lo que ha generado la pandemia, nos dimos cuenta que no estamos preparados para este tipo de cambios.

“Aun cuando existen figuras propuestas como herramientas para estas situaciones fortuitas, es claro que la legislación laboral vigente se ha quedado atrás, pues no es una ley flexible que permita dar un manejo acertado a este tipo de escenarios, y por por esto se dio la necesidad de expedir nuevas normas de manera imprevista y sobre la marcha”, asegura.

Para Cortés Perdomo, es necesaria una reforma que incluya los diferentes escenarios de las nuevas relaciones laborales, incluyendo ahora los relacionados con la pandemia, lo anterior, teniendo en cuenta que el Código Sustantivo del Trabajo, se expidió en 1950, e incluso con sus modificaciones no esta de acorde con las nuevas realidades y dinámicas laborales.

“Actualmente hay una cantidad de proyectos de ley en materia laboral cursando en el Congreso de la República; es claro que, si seguimos legislando de manera dispersa, solo vamos a contar con una serie de normas desordenadas e inflexibles, que van a limitar tanto a empleador como a trabajadores para el desarrollo de sus relaciones”, puntualiza el abogado.

En su concepto, estamos en mora de contar con un nuevo estatuto del trabajo, ordenado y flexible, que sea una verdadera herramienta para el gobierno, los empleadores y los trabajadores y que se pueda adecuar a las condiciones propias de la relación laboral, sin importar los escenarios en las que se den la misma.

“Hubo algunas reformas parciales, se expidieron normas que en su momento fueron herramientas útiles, pero lamentablemente ya no lo son, incluso se ha evidencia que en muchos casos no son entendidas por las autoridades, resultando más contraproducentes que favorables para su aplicación”, agrega Cortés.

Un ejemplo claro de esta situación, puntualiza el jurista, es la aplicación del trabajo en casa. “En razón a la rigurosidad que exige la figura contemplada en la ley como teletrabajo, casi no ha podido ser aplicada, debido precisamente a la imposibilidad de muchas empresas y trabajadores de cumplir con todos y cada uno de los requisitos que la misma requiere”, dice el socio de Cortés, Romero y Asociados Abogados.

El consejo que da el experto para los empresarios, con el fin de asumir los cambios laborales y afrontar de una manera productiva la post pandemia, mientras nace esa normatividad que se requiere, es adaptarse, generar cambios y tener la mente abierta al uso de nuevas herramientas tecnológicas. “Es importante que los empresarios dejen atrás los esquemas tradicionales en cuanto al manejo de las relaciones laborales, y estar un paso adelante en todo momento. No solo se necesita realizar cambios en su infraestructura sino también en la cultura de trabajo. Las herramientas virtuales son fundamentales para seguir operando, y esto es todo un reto que implica en pensar en tecnología, capacitación, entre otros aspectos. La actualidad implica que tanto el empleado como el empleador salgan de su zona de confort para adaptarse a esta nueva realidad”, precisó Cortés.

“Es por esto que las empresas deben prepararse no solo para esta nueva cultura de trabajo, sino para eventuales escenarios en donde algunos trabajadores deban estar en casa y otros realizando sus actividades de manera presencial en las instalaciones de la compañía”, señala.

Entonces es así como es fundamental que se encuentren alternativas y herramientas que garanticen a los empresarios el desarrollo acertado de sus operaciones y el bienestar de sus colaboradores.