Emprendedores británicos que no buscaron empleo

En medio de las dificultades de la economía europea, algunos jóvenes optan por no buscar empleo, más bien se crean uno ellos y dan trabajo a otros. Y unos pocos se vuelven millonarios a los 30 años.

21 de junio de 2011



A simple vista, Dave Kelly es como cualquier otro muchacho de 24 años de edad. Le gusta ir al bar con sus amigos, hacer deporte y disfrutar de los videojuegos.

Pero Dave le prometió a sus padres que sería millonario cuando llegara a los 30 años. Y ahora, sus padres han comenzado a pensar que hay una alta probabilidad de que lo logre.

Cuando estaba a punto de graduarse de la Universidad de Bath, en el Reino Unido, Dave decidió que no valía la pena buscar empleo.

En cambio, él y dos de sus amigos crearon su propia empresa.

"Me di cuenta de que el mercado laboral era bastante pobre, observé cómo varios de mis amigos con mucho talento no conseguían empleo y pensé que tenía que haber una oportunidad de negocio para hacer algo", dice.

"Así que me junté con dos amigos míos y creamos Storm, una empresa de diseño y construcción de sitios en internet. Luego de dos años, empleamos a siete personas. Hemos crecido 200% año tras año", comenta.

Desempleo juvenil

Dave quiere contratar a más personal joven, pero en el Reino Unido quizás él sea parte de un pequeño grupo.


Y es que una nueva investigación sugiere que casi la mitad de todas las empresas en el Reino Unido no tienen pensado emplear jóvenes entre 16 y 21 años este año.

Phil McCabe del Foro de la Empresa Privada del Reino Unido dice que esta situación podría explicar por qué cada vez hay más gente como Dave.

"Existe evidencia sobre un creciente interés vinculado a la iniciativa empresarial entre los jóvenes. Una razón es que hay menos empleos disponibles, por lo que iniciar un negocio se está convirtiendo en una opción de carrera cada vez más viable," explica.

Joven empresario

Dave piensa que tomó la decisión correcta al iniciar su negocio por su cuenta. Ha conseguido una serie de clientes respetados, entre ellos, Peter Gradwell, un empresario local muy conocido.

Gradwell contrató a Storm para crear nuevo sitio en internet y señala que escogió la empresa en parte, debido a que la calidad del trabajo es muy alta y también porque le gusta apoyar a otros jóvenes emprendedores.

Y es que Gradwell entiende todos los retos a los que se enfrenta a Dave porque él hizo lo mismo.

Comenzó su empresa con un préstamo de US$3.240 que le dieron sus padres cuando estaba en la universidad.

Actualmente emplea a 45 personas y factura más de US$8 millones.

Su consejo para cualquier otra persona que quiera formar su propia empresa consiste en tres cosas.

"En primer lugar, debes conseguir a la gente adecuada, confiar en ellos y dejarlos poner manos a la obra".

"En segundo lugar, tienes que aprender a delegar rápidamente. Y tercero, creo que todo el mundo sólo tiene que hacerlo, correr el riesgo. No es muy caro iniciar una empresa y realmente vale la pena asumir el reto", concluye.