Globalmente, un 62% de los consumidores utilizan las redes sociales mientras ve la televisión, tomando como base una semana.

Tendencias

Ver TV se acompaña cada vez más de redes sociales

A nivel global el 62% de los encuestados utiliza las redes sociales mientras ve televisión, eso es 18% más que el año pasado. En Latinoamérica, esta tendencia es aún más marcada con un 83% en México, un 73% en Brasil y un 79% en Chile.

14 de septiembre de 2012

Un estudio llevado a cabo por el Consumer Lab de Ericsson sobre Tendencias del consumidor de TV y video en 2012 en varios países del mundo, incluido Chile, Brasil y Mexico, revela que la televisión social se está convirtiendo en un fenómeno de mercado masivo.

Globalmente, un 62% de los consumidores utilizan las redes sociales mientras ve la televisión, tomando como base una semana. Con respecto al año anterior se registró un aumento de un 18%. Por géneros, también a nivel mundial, el 66% de las mujeres se involucran en este comportamiento, comparado con el 58% de los hombres. El 25% de los consumidores utiliza los medios sociales para comentar lo que están viendo mientras lo están mirando.

Luciana Gontijo, responsable por el Ericsson ConsumerLab de Ericsson Latinoamérica, comenta que "los dispositivos móviles son una parte importante de la experiencia de la televisión; el 67% de los consumidores utilizan teléfonos inteligentes, tablets, computadores portátiles para ver televisión o vídeos. Por otra parte, el 70% de los consumidores dicen que usan los servicios bajo demanda semanalmente. A su vez, ver televisión en movimiento está creciendo en popularidad.

La encuesta global asegura que el 50% del tiempo que se dedica a ver televisión y vídeo en un teléfono inteligente, se realiza fuera del hogar, donde las conexiones de banda ancha móvil están contribuyendo al crecimiento".

A pesar de que el comportamiento de aquellos que ven televisión y videos bajo demanda ha ido cambiando, sólo el 7% de los consumidores dice que va a reducir sus suscripciones a la televisión en un futuro cercano. De hecho, en lugar de ver la TV convencional para bajar los costos, los consumidores están dispuestos a pagar más por una experiencia visual mejorada; así, el 41% de los consumidores dice estar dispuesto a pagar por contenidos de TV y vídeo en alta definición.

La realidad en Latinoamérica es parte de la tendencia mundial. Un 82% de los chilenos consultados en el estudio confirmó estar interesado en contenidos en alta definición, lo mismo pasa en Brasil con un 64% y en México con un 78%.

Respecto al fenómeno de la televisión social, de los países analizados de la región, los mexicanos son los que más combinan los medios sociales con la televisión, ya que un 83% esta conectado a Facebook o Twitter mientras ve TV, mientras que el Chile lo hace un 79% y en Brasil un 73% de las personas encuestadas. En esta misma tendencia, un 79% de los encuestados en México usan el chat cuando están frente al televisor; un 76% lo hace en Chile y un 61% en Brasil.

Más de la mitad de los consumidores quiere elegir su propia televisión y los contenidos de vídeo. A este respecto Gontijo dice: "A medida que aumentan los servicios y el número de pantallas, las personas buscan ansiosamente servicios agregados que puedan traer “todo en uno”. Esto debería permitir a los consumidores mezclar contenidos bajo demanda y de TV convencional, que incluye contenido en vivo, tener facilidad para descubrir contenidos, aprovechar el valor de la televisión social y proporcionarles acceso transparente a través de cualquier dispositivo".

Los datos de la encuesta fueron recogidos en Brasil, Chile, China, Alemania, Italia, México, Corea del Sur, España, Suecia, Taiwán, Reino Unido y EE.UU. Se realizaron 12.000 entrevistas online lo que representa a más de 460 millones de consumidores de estas regiones.

Ericsson ConsumerLab obtiene su conocimiento a través de un programa de investigación del consumo mundial basado en entrevistas a 100.000 personas cada año en más de 40 países y en 15 grandes ciudades. Se utilizan métodos tanto cuantitativos como cualitativos, y se invierten cientos de horas con los consumidores de diferentes culturas.