Jornada de tensión gremial

Los miembros del Consejo Gremial se habían dado cita el jueves a las nueve de la mañana en el Hotel Hilton para ratificar ante la opinión pública las críticas que tienen contra la Reforma Tributaria que actualmente estudia el Congreso.

Al evento estaban citados los presidentes de los más importantes gremios, como la Andi, Fenalco, Asofondos, Fasecolda, Asobancaria, entre otros; y empresarios de las compañías más grandes del país.

No obstante, a última hora el evento fue cancelado sin mayores explicaciones. Dinero consultó a varios de los empresarios y dirigentes gremiales invitados a la rueda de prensa y la mayoría coincidió en señalar que fue cancelada “de forma unilateral” por Bruce Mac Master, presidente del Consejo Gremial y de la Andi, decisión que causó desazón entre algunos.

La decisión dejó sinsabor entre algunos de los empresarios, pues para la mayoría es clara la cercanía de Mac Master con el actual Gobierno, del cual fue funcionario, tanto como viceministro de Hacienda, como director del Departamento para la Prosperidad Social (DPS). El malestar se explica porque muchos sintieron que se les dio la espalda y que lo que se busca por parte del Presidente de la Andi es suavizar el tono de las inconformidades que tienen los gremios con la ponencia aprobada en primer debate en el Congreso.

La verdad es que el miércoles en la tarde, el Gobierno se reunió con parte de la cúpula del consejo gremial, es decir los presidentes de la Andi, de la SAC, Rafael Mejía y de Camacol, Sandra Forero, entre otros. El mensaje que llevaron tanto el Ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, como su viceministro, Andrés Escobar, es que el Presidente había señalado que estaba dispuesto a escuchar las quejas de los gremios.

Según una de las fuentes consultadas, eso desactivó la rueda de prensa, pues "no tiene sentido que hiciéramos un pronunciamiento, cuando el Presidente nos abrió las puertas del diálogo". Eso precipitó la cancelación de la rueda de prensa.

En cambio, fue emitido un comunicado a nombre de todo el Consejo Gremial, y leído por Mac Master, en el que se ratifica el compromiso de los empresarios con superar los problemas fiscales del país y donde no se menciona ninguna de las duras críticas de los empresarios a la reforma en general y al impuesto al patrimonio en particular. Para tramitar las quejas se creó una comisión que dialogará directamente con el Gobierno sobre los puntos álgidos.

La tensión entre empresarios y Gobierno ha venido subiendo de tono. El pasado lunes, el Presidente les lanzó un dardo a los críticos de la reforma, al afirmar que ellos “ponen a los propios abogados, o columnistas que son amigos de los que no quieren pagar los impuestos, a vociferar. Pues eso es parte del juego, pero tenemos muy claro qué es lo que se requiere hacer”.

Santos defendió la Reforma señalando que los ricos del país se esconden detrás de la clase media. El Primer mandatario dijo que los más pudientes del país quieren vender al impuesto a la riqueza como un tributo contra el pueblo, cuando la realidad, según él, es que serán los 50 mil colombianos más adinerados y 35 mil empresas con las mayores utilidades las que tendrán que pagar.

Agregó “los ricos en Colombia tienen demasiado, los pobres no tienen nada, se trata de que sea un país más equitativo, no pueden continuar rodeados de pobreza extrema”.

No obstante la visión de los empresarios es otra y muchos insisten en que sí tienen disposición para pagar más impuestos y que no están asustados con los $12,5 billones que se necesitan para cubrir el faltante presupuestal de 2015.

Sin embargo, dicen que sus críticas son de carácter técnico, pues el impuesto al patrimonio grava sus patrimonios, sus stocks de capital y no sus ganancias. Por eso se muestran más partidarios de la sobretasa al CREE, que del impuesto a la riqueza.

El Gobierno no da señales de ceder en su posición y sólo les queda hasta el martes para definir la ponencia que será radicada en el Congreso. Lo cierto es que los empresarios todavía tienen que dar una dura batalla para señalar sus quejas. Es posible que eso siga generando tensiones al interior del Consejo Gremial.