¿Quién copia a quién?

Tras las denuncias hechas por la colombiana PC Smart por el uso indebido de la marca Touchsmart por parte de Hewlett Packard, la multinacional asegura que no está violando el derecho marcario de ninguna empresa en Colombia ni en el mundo.

Sin embargo, estas mismas empresas tienen el mismo conflicto en Perú y en Ecuador, aunque aparentemente la situación en los países vecinos sí favorecerá a la colombiana.

Frente al tema, la dirección de Hewlett Packard argumenta que HP Touchsmart es una marca registrada y reconocida a nivel mundial, pero la firma Moragudelo Abogados Asociados, apoderada de PC Smart, dice que es un argumento débil y que, de cualquier manera, en Colombia no puede incurrir en el uso de una marca que ya es exclusiva de otra empresa.

Pero lo más grave para el socio de la firma de abogados, Santiago Mora, es el comportamiento de la SIC, quien luego de haber concedido la marca a PC Smart en 2009, también lo hizo para Hewlett Packard, empresa que inició el trámite de registro pocos días después del reclamo de PC Smart a la multinacional (6 de diciembre de 2010) y que le fue concedida en junio de 2011.

La rapidez del proceso con que se aprobó la marca para Hewlett Packard sorprende a Mora, pues afirma que se trata de un procedimiento que usualmente toma un año o más, pero en este caso fueron 6 meses.

El registro de una marca

Cuando una empresa registra una marca, la SIC debe llevar a cabo un examen de “registrabilidad”, que consiste en una evaluación de criterios que descarten similitudes en los nombres o en las imágenes, que en caso positivo es causal de “irregistrabilidad”.

Por esa razón, PC Smart señala que la SIC está desconociendo sus derechos y, además, los del consumidor, pues HP Touchsmart y la marca Touchsmart pueden generar confusión, más cuando se trata de marcas de productos tecnológicos.

La película continuará, pues ahora Hewlett Packard presentó demandas de nulidad a la marca registrada por PC Smart y, según Mora, “la SIC se lavó las manos y dejó el proceso en manos del Consejo de Estado”.