Cómo lograr empleados más felices en las empresas con pequeños cambios

Mientras las organizaciones se miden por los resultados que obtienen, las personas lo hacen por los momentos buenos o malos que vivimos. A simple vista puede parecer que los objetivos de las organizaciones y las personas van en sentidos contrarios. Sin embargo, el éxito de las empresas productivas son los empleados felices y motivados.

Lograr esa armonía entre los objetivos de unos y otros es el mayor desafío que tienen las compañías, reconoce José Caro, socio fundador de Plurum, una consultora especializada en entrenamiento en bienestar corporativo. Eso sí, quienes lo han conseguido tienen asegurado el éxito.

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Algunas mediciones de felicidad y bienestar en las organizaciones que ha realizado Plurum y que involucran a no menos de 45.000 personas les ha permitido obtener conclusiones interesantes, dice Caro.

Por un lado, han identificado que los empleados buscan mejorar los mínimos vitales, que hacen referencia a los cuatro elementos base de la creación de confianza: la compensación, la jornada laboral, la estabilidad y las herramientas de trabajo.

La encuesta encontró que 2 de cada 3 personas sienten que algunos de estos factores no son atendidos en su trabajo. Y el que menos se cumple es el que tiene que ver con la estabilidad. Además, a Caro le preocupa que solo 34% de las personas se siente reconocida en su trabajo.

Esto implica que las empresas deben trabajar más en temas como el reconocimiento y exaltación de los logros de los colaboradores y el agradecimiento por un buen trabajo.

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La tercera conclusión de esta medición apunta a la falta de un ambiente colaborativo. En este frente encontraron que la mitad de las personas consultadas creen que en sus organizaciones se trabaja por silos y que el trabajo transversal no es parte del ADN de sus compañías. Por eso reclaman un ambiente más colaborativo. Eso implica repensar las metodologías de participación y escucha activa de los empleados.

¿Cómo responder a estos desafíos que reducen el bienestar y le quitan felicidad a los empleados? Caro señala que su experiencia como consultor en temas de felicidad empresarial ha podido identificar cinco frentes de trabajo para mejorar los resultados, que están resumidos en el acróstico Smile. La S se refiere a soñar con propósito, lo que implica alinear al equipo con el propósito organizacional y dedicar tiempo a conocer los sueños de su gente.

La M se enfoca en la medición del potencial, tanto individual como del equipo, reconocer las fortalezas propias y colectivas. La I apunta a innovar y promover la transformación; y retar al equipo, fomentar la curiosidad y ser el cambio. La L se refiere a liderar desde el corazón, construyendo relaciones cercanas y profundas y la E es entrega de resultados, medir la gestión individual y del equipo. ¿Cómo lograr empleados motivados y felices cambiando pequeñas cosas? Esto recomienda el experto.

1. Reconocer los logros y esfuerzos. Una competencia que los líderes deben desarrollar es la de exaltar los logros de su equipo a nivel integral o individual, y agradecer de manera frecuente por los esfuerzos que las personas realizan. Sentirse reconocido es un tema esencial en el compromiso de las personas con su trabajo.

2. Celebrar también las ‘metidas de pata‘ o equivocaciones. Las personas deben sentir la confianza para tomar riesgos controlados en su trabajo y tener la tranquilidad de que si se equivocan no serán castigados, los líderes tradicionales gastan mucho tiempo buscando culpables, un liderazgo ágil y cercano busca materializar las “metidas de pata” en oportunidades para aprender y crecer.

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3. Retar la zona de confort. Sentirse desafiado es uno de los aspectos clave que buscan las personas en su trabajo, un liderazgo para la felicidad debe fomentar y crear en los equipos de trabajo escenarios de cocreación, proyectos interdisciplinarios, laboratorios de ideas, entre otros espacios que fomenten la curiosidad como competencia clave para la innovación.

4. Gerenciar fuera del escritorio. Los nuevos modelos de gestión de equipos le exigen a los líderes de hoy que salgan de sus oficinas y se involucren del día a día de la operación, que hablen con los personas, que acompañen el negocio desde la acción diaria y que despachen menos detrás de un escritorio.

5. Alinear el propósito. Los líderes deben invertir el tiempo suficiente para comunicar a los equipos el propósito de la organización, el para qué existen, el cómo quieren impactar la sociedad; sentir que el trabajo genera un impacto positivo en el mundo es un factor fundamental en la permanencia de largo plazo en una organización.

Aumentar el compromiso

Cuando los empleados se ponen la camiseta de la empresa, los resultados llegan más rápido, asegura José Caro, socio de Plurum. Por eso recomienda fomentar tres valores para lograr que los empleados sientan que su trabajo tiene significado. Estos son:

1. Orgullo por su empresa.

2. Confianza en los líderes.

3. Reconocimiento de logros y esfuerzos. Según Caro, solo las acciones articuladas para fomentar esos sentimientos en las personas elevan el nivel de compromisos de una base transaccional, donde lo que más me importa es mi sueldo, a una emocional, en la que lo más valorado es pertenecer y aportar a la empresa cuando esta lo requiera según sus metas.