Nuevo operador de Electricaribe, aplazado hasta febrero de 2020

Una de las determinaciones más importantes para final de este año quedó aplazada para febrero de 2020: la escogencia del nuevo operador que manejará a Electricaribe.

En principio esta operación estaba programada para diciembre de este año, tras unas modificaciones que hizo el Gobierno en el cronograma y la estructura. Sin embargo, como resultado de la caída de la Ley de Financiamiento en la Corte Constitucional, que declaró la inexequibilidad de esta ley, y el trámite legislativo que debe adelantar el Gobierno en el Congreso para sacar adelante una nueva reforma tributaria que la reemplace, “se hace necesario una extensión de tiempo en el proceso de subastas con el fin de recibir ofertas vinculantes sobre información definitiva”, dijo la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios en un comunicado.

Con ello, las subastas de Nuevo Caribe (mercado completo), o en su lugar de Caribe Sol y Caribe Mar –las dos áreas en las que se dividió la operación de la actual Electricaribe- se realizarán durante el mes de febrero de 2020.

Varios han sido los damnificados por la caída de la Ley de Financiamiento y el anuncio del Gobierno de volverla a presentar como reforma tributaria y buscar su aprobación antes de terminar este año. Por un lado la decisión de la Corte Constitucional hizo cambiar también la agenda legislativa del Gobierno y un proyecto clave que se ha venido socializando a los largo del año: la reforma pensional, quedó también para el año entrante. De la misma manera, en las últimas semanas se había planteado la posibilidad de avanzar en un proyecto de ley de reforma laboral, dadas las preocupantes cifras de desempleo que hoy registra el país y que no ha bajado de doble dígito en los últimos 7 meses.

A raíz del trámite que exige una nueva reforma tributaria en el Congreso de la República, el Gobierno Nacional ha analizado en las últimas dos semanas el impacto de esta decisión en la valoración de los mercados de energía Caribe Sol, Caribe Mar y Nuevo Caribe (mercado completo), en aspectos determinantes como la tasa nominal de renta, la tasa de mega inversiones y la deducción del IVA pagado en la adquisición de bienes de capital que tienen un efecto relevante sobre la transacción.

“La variación en la valoración podría ascender a cerca de $500.000 millones; razón por la cual Electricaribe ve la necesidad de prorrogar el plazo de las subastas que adelanta actualmente para la presentación de ofertas vinculantes. Esta prórroga se aplica dentro del proceso de búsqueda de uno o más inversionistas para el sistema de distribución local y de transmisión regional, así como para la actividad de comercialización de energía eléctrica que realiza la empresa en los departamentos de Atlántico, Bolívar, Cesar, Córdoba, Guajira, Magdalena y Sucre; con el fin de tener certeza sobre los aspectos fiscales que se están tramitando actualmente en el Congreso de la República”, agregó la Superintendencia.

El nuevo cronograma contempla la presentación de sobres de oferta el 20 de febrero de 2020. La subasta por el mercado completo se realizará el 26 de febrero y por los mercados segmentados el 28 de febrero. Este nuevo plazo se verá reflejado mediante una adenda al reglamento del proceso que será publicado por la agente especial de Electricaribe.

“El Gobierno Nacional –señaló la Superintendencia- continuará apoyando a la compañía intervenida para asegurar la prestación del servicio de energía eléctrica en la costa Caribe. Por su parte, la empresa continuará contratando y ejecutando su plan de inversiones por más $800.000 millones que se traduce en obras dirigidas a mejorar progresivamente la calidad en la prestación del servicio”.

Extraoficialmente se ha conocido que EPM, Celsia, Alberto Ríos, Inkia Energy y Electricidad de Portugal (EDP) estarían interesados en participar en el proceso. Está por analizarse qué impacto puede tener este aplazamiento y las cuentas del Gobierno en el apetito de este activo, que se ha convertido en una verdadera ‘papa caliente‘ tras la intervención y salida de su socio anterior, Gas Natural Fenosa, que además tiene demandado al Estado colombiano en estrados internacionales por este caso.