Andrea Zuluaga y Juan David Tamayo, fundadores de Frozen Rolls. | Foto: Frozen Rolls

EMPRENDIMIENTO

Frozen Rolls aspira a expandirse a 30 puntos este año

Con los helados en rollitos, los esposos Juan David Tamayo Zuluaga y Andrea Zuluaga quieren replicar su éxito de Medellín en otras ciudades del país.

21 de abril de 2019

En un recorrido por Asia, a los esposos Juan David Tamayo Zuluaga y Andrea Zuluaga les llamó la atención en Tailandia un líquido que se mezclaba en una plancha con distintas adiciones y se convertía en rollitos. Cuando se acercaron a ver, descubrieron que era helado.

Lo compraron y lo repitieron. Al siguiente día volvieron al mismo lugar, en donde terminaron pasando más de siete días aprendiendo a hacerlo y al volver a Colombia, todo fue dispuesto para comprar las máquinas necesarias para emprender con esa idea en el país.

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Se lanzaron a importar dos máquinas directamente, que esperaban que les llegaran hasta la puerta de su casa. Pero cuando entraron al país, los llamaron a pedirles un certificado de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales que garantizara que esas máquinas habían sido fabricadas en procesos sostenibles con el medio ambiente.

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“Nosotros no lo sabíamos y habíamos comprado dos máquinas”, recuerda Tamayo, quien había esperado durante los tres meses que duró la importación. Ese certificado se solicitaba en la Embajada de Colombia en China y el proveedor les ayudó con el trámite, que demoró un mes y costó cerca de US$200.

En ese momento, cuando estaban listos para darle vida a su negocio, el certificado demoró 15 días hábiles en llegar y para mostrar el original, tenían que llevarlo hasta el Puerto de Buenaventura. “En ese momento ya no teníamos nada que hacer, las máquinas las incautó la Dian y pensamos incluso en desistir del negocio”, comentó Juan David a Dinero

Pero fue así como hace dos años le dieron vida a Frozen Rolls, al encontrar un distribuidor en Colombia que comercializaba los aparatos, a pesar de que tenían pérdidas por las máquinas que nunca vieron y dos meses de arriendo.

Su primer punto fue en el centro comercial Gran Plaza de la capital de Antioquia y a mediados de 2018, se dieron la oportunidad de comercializar sus licencias de distribución, lo que ha derivado en 8 puntos a nivel nacional.

Para este año, tienen proyectado llegar a 30 puntos y expandirse a varias ciudades del país, adicionales a Medellín, Popayán, Pasto y Armenia, donde ya tienen operaciones.

“La empresa se reconoce por la comercialización de helados artesanales en donde cada persona puede elegir el sabor de helado y las adiciones que quiere agregarle. Contamos con 4 sabores de helados y más de 30 adiciones, que hacen infinitas combinaciones. El cliente tiene la oportunidad de ver desde que el helado está líquido, luego la mezcla con las adiciones elegidas y la entrega finalmente en rollitos”, contó Juan David Tamayo.

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Uno de los valores agregados de Frozen Rolls, de acuerdo con Tamayo, es que los consumidores pueden vivir una experiencia en el consumo de helados.

Con los proyectos del futuro cercano, seguirán en la distribución de licencias para hacer convenios con emprendedores que busquen “un beneficio no solo económico, sino también la expansión y crecimiento de la marca”.

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