En sus campos, las aguas son tratadas biológicamente para su purificación, los residuos sólidos se clasifican según sus características y los que pueden ser reciclados se le entregan a la comunidad. Los demás son llevados a un relleno sanitario o incinerados, según el caso.
Por otra parte, están los programas de reforestación que entre Cusiana y Cupiagua ya suman más de 60.000 árboles. La meta es llegar a los 12 millones en los próximos años.