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Crisis

Situación de EE. UU. no pone en riesgo grado de inversión

La calificadora S&P dijo que no bajará las calificaciones de deuda de los países de América Latina, aún cuando sigan presentándose malas noticias sobre crecimiento económico de Estados Unidos y Europa. Los países más afectados serían los del Caribe y México.

31 de agosto de 2011

Aunque la calificadora internacional Standard & Poor’s haya disminuido la calificación de la deuda norteamericana de AAA a AA+ con perspectiva negativa y las noticias sobre la disminución inminente del crecimiento de los Estados Unidos y Europa sean cada vez mayores, afirmó que los países de América Latina y el Caribe tienen un colchón para absorber el impacto de lo que pasa a nivel global.

La entidad internacional confía en que todos los países de la región se encuentran en la mejor posición de todos los tiempos para aguantar la falta de acceso al mercado externo o a un cambio radical en las condiciones económicas globales. “Hay unos países con más flexibilidad en su tipo de cambio, hay muchos bancos centrales con más reservas que nunca y también el sector financiero de la región cuenta con mejor salud que antes”, destacó el managing director de S&P, Joydeep Mukherji.

Donde no encuentran tanto colchón es el sector real. La calificadora piensa que puede presentarse una disminución en las exportaciones de la región, que son importantes para su crecimiento y para el ingreso de los gobiernos. “México y Centroamérica y del Caribe están más vulnerables pues los vínculos de sus mercados con los de Europa y Estados Unidos son más estrechos que el de los países de Suramérica”, destacó el directivo.

¿Cuáles son los efectos de una desaceleración de China?

El principal afectado de una desaceleración de la economía norteamericana sería China. Dependerá del tipo de choque que sufra la economía asiática el efecto sobre los países de América Latina y el Caribe.

“Si China disminuye sus exportaciones hacia Estados Unidos o Europa el impacto será mucho menor, sobre todo en Suramérica. Pero, si lo que disminuye es la demanda interna si se verá muy afectada Suramérica, porque las exportaciones de productos básicos y materias primas provienen principalmente de Suramérica. En estos momentos el destino final de la mayor parte de esos recursos es el consumo local y el sector de construcción local de china”, complementó Mukherji

Por lo tanto, en la medida que el gobierno de China pueda mantener la demanda interna de su país, los países de Suramérica no se verán afectados.

¿Qué pueden hacer los gobiernos?

Para la calificadora los países en la región no son tan dependientes de la economía norteamericana, ni tienen un motor de crecimiento tan fuerte como lo tiene China, India e Indonesia. Esto quiere decir, que cuando hay menos demanda desde afuera, la tasa de crecimiento de la región tiene que bajar no hay otra opción.

Según el directivo, los gobiernos tienen margen de maniobra porque aún pueden aplicar políticas contracíclicas monetarias y fiscales para aguantar el impacto de la caída de la demanda sobre la economía.

La calificación no será rebajada por un choque externo, mientras los gobiernos conserven la capacidad política de sobrepasar la situación, absorber el impacto y aceptar una tasa de crecimiento más baja, pero sin poner en riesgo la estabilidad fiscal y monetaria.