La urgencia de una mayor seguridad hídrica para la economía Latinoamericana

A grandes rasgos, la seguridad hídrica consiste en tener 1. Disponibilidad de agua adecuada para el abastecimiento humano, la protección de ecosistemas y la producción. 2. Un nivel aceptable de riesgos asociados al agua para la población, el medio ambiente y la economía y 3. Capacidad de aprovechar el agua de manera sustentable. Así lo afirmó el Consultor de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Humberto Peña, en su informe sobre ‘Desafíos de la seguridad hídrica en América Latina y el Caribe’.

Dados los acelerados cambios a nivel político, social y económico, la región latinoamericana enfrenta grandes desafíos para alcanzar una seguridad hídrica adecuada. Según Peña, existen áreas prioritarias donde la seguridad del agua es esencial para el desarrollo socioeconómico de la región:

• El acceso de la población a niveles adecuados de agua y saneamiento
• Disponibilidad de agua para garantizar un desarrollo productivo sostenible.
• Reducción de riesgos relacionados con el exceso de agua.
• Protección de la salud y el medio ambiente.

Si se considera la representación que tiene la explotación de recursos naturales en la economía de la región, la gestión del agua juega un papel muy importante.

Según Peña, en  la región se extraen alrededor de 290.000 millones de metros cúbicos de agua al año (lo cual equivale al 2,2% de los recursos disponibles).

La principal actividad que consume agua corresponde a la agricultura, la cual representa un 70% del total extraído. Por su parte, el consumo doméstico alcanza el 19% del total  y el uso industrial y minero significa el restante 11%.

Fuente: Cepal, elaboración Dinero.

Principales cifras

• Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el riego utilizado en la agricultura representa unas 18 millones de hectáreas.
• El sector agrícola constituye alrededor del 5% del Producto Interno Bruto (PIB) y un 19% del empleo dentro de la región.
• El agua también es un insumo importante para la actividad minera de la región, y esta produce 45% del cobre y  el 51% de la plata a nivel mundial.
• Según Peña, el tratamiento de aguas residuales y el saneamiento, son ítems importantes para el desarrollo de la actividad turística. El turismo es un sector de vital importancia en la economía de la región y representa cerca del 25% de la entrada de divisas del extranjero.
• En promedio, el 65% de la electricidad en los países de la región proviene de las hidroeléctricas. Según el informe, en países como Brasil, Colombia, Venezuela y Costa Rica el porcentaje puede ser mayor.
• Uno de los aspectos más importantes, es que la región latinoamericana cuenta con la mayor biodiversidad biológica del mundo.

Las principales ciudades latinoamericanas generan alrededor del 60% del PIB regional. Otro de los grandes desafíos a tener en cuenta para la gestión y el aprovechamiento del agua, hace parte de los procesos acelerados de urbanización en la región. Según Peña, se espera que para 2050 más de un 85% del total de la población en la región habite en las ciudades.

Este proceso de urbanización obliga a considerar aspectos como una mejor infraestructura para afrontar cambios meteorológicos, un mayor abastecimiento de agua por una creciente demanda doméstica e industrial y un mejor desarrollo de condiciones sanitarias.

“El acceso a los servicios de agua potable y saneamiento, no solo resulta crítico por la salud pública, sino que también contribuye efectivamente a la lucha contra la pobreza, ya que ello permite elevar los niveles de ingreso disponibles de los pobres  hasta en un 14%, debido a los menores costos de abastecimiento y a la reducción de los gastos en salud”, aclara Peña.