Las mujeres ya mandan en la élite económica mundial

Paulatinamente las mujeres se han venido tomando el poder en buena parte de la institucionalidad económica mundial. El asunto comenzó hace ya un tiempo, pues ellas se convirtieron en las líderes de los equipos de investigaciones económicas en poderosas instituciones como el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM) y la Ocde.

El tema empezó a llamar la atención de los expertos que consideran un cambio importante para una actividad (como muchas otras) que ha estado dominada por los hombres.

Pero el proceso, en el caso de las entidades multilaterales, parece estar en una coyuntura especial. De concretarse dos nombramientos claves que están a punto de conocerse, el poder de las mujeres ya no se circunscribirá al área de investigación técnica, sino que subirá hasta las máximas instancias de decisión en estas entidades.

Christine Lagarde, candidata al BCE.

De aquí a final del año deberán concretarse los nombramientos de Christine Lagarde como presidente del Banco Central Europeo y de la búlgara Kristalina Georgieva como directora del Fondo Monetario Internacional. Esto pone de relieve cómo las mujeres se han ganado a pulso un espacio en el competido mundo de la administración de los más importantes centros de poder económico.

Ellas son las primeras en llegar a la cima, pero ahí a su lado están Laurence Boone, economista en jefe de la Ocde; Gita Gopinath, directora del departamento de estudios económicos del FMI; Pinelopi Koujianou, economista jefe del Banco Mundial y Beata Javorcik, economista jefe del Banco Europeo para la Reconstrucción y Desarrollo (Berd), que se posesiona ahora en septiembre.

Lo primero que hay que decir es que obviamente hay una tendencia a desconocer el papel de la mujer en el mundo de la economía.

Laurence Boone, economista en jefe de la Ocde.

Apenas en 2011 Lagarde logró convertirse en la directora del FMI, un cargo que hasta ese momento había estado reservado para hombres. Ella misma va a ser igualmente la primera mujer en llegar a la presidencia del Banco Central Europeo y su sucesora en el FMI va a ser otra mujer. En el caso regional vale la pena mencionar a Alicia Bárcena la secretaria de la Cepal.

Vale la pena preguntarse si esta coyuntura puede representar la consolidación de una verdadera tendencia en la que las mujeres dominen este ámbito del poder económico mundial.

¿Qué pasaría si cada vez más mujeres tienen el poder de la economía? La propia Lagarde tiene el panorama claro. Le dijo a la agencia AFP, cuando se le preguntó por el cada vez más importante papel de las mujeres en estas altas jerarquías que "si los bancos y los supervisores financieros aumentan la proporción de mujeres en posiciones altas, el sector bancario sería más estable".

Kristalina Georgieva, candidata al FMI.

Es obvio que esto pone en evidencia un problema de brecha de oportunidades. En 2014, la revista The Economist publicó un ranking con los economistas más influyentes de la historia. Muchos criticaron la clasificación porque justamente no aparecía ni una sola mujer.

Las mujeres representan en promedio 19% del total de economistas, según lo publicado por Soledad Zignago, la economista del Banco de Francia (BdF), junto con Anne Boring, en el blog del BdF. La subrepresentación es un asunto mundial.

Por ejemplo, en Colombia hay una larga tradición de excelentes economistas mujeres y apenas tres han llegado a la junta directiva del Banco de la República. Esto es apenas 12,5% de 24 codirectores que ha habido en los 28 años de historia moderna de esta entidad. Por el lado de la gerencia del Banco, el panorama es todavía más crítico, porque no ha habido una sola mujer que haya ocupado ese cargo. Ni qué decir del ministerio de Hacienda, que nunca ha estado en manos de una mujer.

Gita Gopinath, directora de estudios económicos del FMI

No obstante, ya hay un importante grupo de mujeres líderes en los asuntos económicos. Las actuales codirectoras Carolina Soto y Ana Fernanda Maiguashca son un buen ejemplo. Antes de ellas estuvo en la entidad como pionera María Mercedes Cuéllar. Igualmente, el Departamento Nacional de Planeación es dirigido por la economista Gloria Alonso y antes de ella estuvieron Tatiana Orozco, Carolina Rentería, Cecilia López Montaño y la misma María Mercedes Cuéllar. Hay que sumar a la lista un sinnúmero de economistas que ya figuran en la academia y en otros centros del poder económico como gremios y ministerios.

Alicia Bárcena, secretaria de la Cepal.

Aún así, todavía queda mucho terreno por ganar en la tarea por cerrar la brecha de oportunidades en el mundo de la economía. Con la inminente llegada de Lagarde al Banco Central Europeo y de Georgieva al FMI se estaría consolidando una élite de mujeres en los centros de poder económico, lo que ya se convierte en una cuota representativa.

En Colombia es necesario romper barreras e impulsar que haya pronto. por primera vez en la historia, una gerente del Banco de la República y una Ministra de Hacienda. Si bien hay una coyuntura con los nombramientos en el FMI y el BCE, no es tiempo de cantar victoria. Aunque han avanzado en posiciones de liderazgo, todavía no se puede decir que ellas tienen el timón del mundo.

Pinelopi Koujianou, economista en jefe del BM.