| Foto: Karen Salamanca

CALIFICACIONES DE RIESGO

Colombia: sin margen de error en su plan de ajuste

Richard Francis, director de rating soberano de la agencia calificadora Fitch, explicó que el plan de ajuste del Gobierno está muy apretado y que todo le debe salir bien, porque no hay margen para los errores o los imprevistos en esa estrategia. Se muestra partidario de otra reforma tributaria.

20 de junio de 2019

El experto en calificaciones estuvo en Bogotá explicando en distintos escenarios la naturaleza de la decisión de Fitch de mantener la calificación de la deuda soberana colombiana en BBB pero cambiar el outlook o perspectiva de positiva a negativa, lo que muestra dudas de la agencia sobre la estrategia económica del país.

Según Francis, Colombia tiene que abordar de manera definitiva el ajuste fiscal necesario para alejar cualquier duda sobre la capacidad del Estado de cumplir con sus obligaciones financieras.

Recordó que durante los últimos años, las metas fiscales han venido siendo flexibilizadas y ni siquiera este año la historia fue distinta, pues se relajaron de nuevos los objetivos de déficit.

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“Este año fue por la migración venezolana y a eso hay que sumarle el impacto de la ley de financiamiento, porque el fisco pierde ingresos a partir de 2020”, comentó.

Si se suman la necesidad de cumplir con la meta fiscal, más las pérdidas de ingresos originadas por los beneficios establecidos en la ley de financiamiento, se tendrá que hablar de un ajuste fiscal de al menos 1 punto del PIB en los próximos años y casi 2% del PIB para 2022.

Recordó que el Gobierno colombiano ha venido cumpliendo con las metas fiscales pero de manera coyuntural, pues, por ejemplo, en 2017, las multas sobre las compañías de telecomunicaciones generaron prácticamente medio punto del PIB en ingresos, mientras que en 2018, la meta se logró por medio del prepago de impuesto de renta por parte de Ecopetrol, que representó al menos 0,3% del PIB.

“Se espera que en 2019 y 2020 se cubra parte del déficit con ventas de activos”, explicó Francis al reiterar que de nuevo se tratará de medidas coyunturales.

Para él, esto podría deteriorar la credibilidad de las metas y la estrategia.

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La semana pasada el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, anunció que para la elaboración del marco fiscal de mediano plazo, el Gobierno estima que logrará un déficit fiscal de 2,4% en 2019 y un crecimiento del PIB de 3,6%. Francis dice que estas son buenas noticias, aunque se mostró escéptico.

“Pasar la meta de déficit de 2,7% a 2,4% es bueno, porque quiere decir que va a haber balance primario y esto podría estabilizar el nivel de deuda en términos de PIB”, comentó.

Sin embargo dijo que en Fitch tenían dudas sobre la posibilidad de que la economía colombiana crezca 3,6% este año y que posteriormente alcance a llegar hasta 4%. Para él, el PIB potencial de Colombia da para un crecimiento anual de 3,5% y no de 4%.

Aseguró que muchos expertos están viendo una desaceleración del crecimiento en todo el planeta, y muy pocos están viendo crecimientos de 4% en la mayoría de países.

El gobierno estima que los beneficios en renta para las compañías son un estímulo para el crecimiento y funda parte de su estrategia en un impacto positivo de estas medidas en el PIB y, en consecuencia, en el recaudo de impuestos.

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En general, Francis cree que el país tiene que encontrar una manera sostenible de financiar su déficit, pues la mayor parte del ajuste se logra por medio de medidas coyunturales como las ya mencionadas.

Recordó que el presupuesto de Colombia es inflexible y que por esta razón las posibilidades de recortar gasto están acotadas. Especialmente, lo que hay para reducir son los gastos de capital, es decir, inversiones.

Igualmente puso énfasis en el déficit de cuenta corriente, pues existen muchas dudas sobre cómo financiarlo. Para él, si se logra con inversión extranjera directa, está bien, pero cualquier de las otras formas de enfrentar el problema son de cuidado: primero, inversión de portafolio que puede salir en cualquier momento, generando un choque externo considerable y, segundo, pero más peligroso aún, con mayor endeudamiento.

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Ratificó que Colombia debe buscar fuentes sostenibles para cubrir los faltantes fiscales, estabilizar la deuda en términos de PIB y fortalecer el crecimiento de la economía. Claramente, para Fitch, sería necesario considerar otra reforma tributaria, porque sería la forma más clara de aumentar los ingresos del Estado de manera sostenible y estructural.

Francis dijo que en noviembre se dará la segunda revisión de la calificación de Colombia este año.