En primera instancia, son los principales países importadores los que se llevan la tajada más grande del problema.

Agricultura

¿Por qué algunos países sufren más los precios de los alimentos que otros?

Aunque el precio mundial de los alimentos baja continuamente, los efectos del cambio climático entre otros factores coloca a los países emergentes en una situación complicada con fuertes riesgos económicos y sociales.

13 de octubre de 2015

Uno de los principales efectos del aumento de los precios de los alimentos en un determinado país se traduce en un mayor índice de precios al consumidor (IPC) o nivel de inflación. Según cifras del Dane, en Colombia, la variación en el precio de los alimentos explica el 50% del cambio de 3,66% en 2014 a 5,35% hoy en día.
 
Los alimentos más baratos desde el 2009

Sin embargo, este resultado diverge ampliamente respecto a los resultados del precio mundial de los alimentos. Datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) muestran que el precio internacional de los alimentos ha caído a su nivel más bajo desde el año 2009.

El último reporte de la FAO de octubre de 2015, registró en promedio un aumento de los precios respecto a agosto pero en definitiva 18,9% más baratos que hace un año.



Fuente FAO, Cálculos Dinero

Los cereales han caído 13,1% respecto a septiembre del año anterior y vienen experimentando una constante caída durante los primeros 9 meses de 2015 gracias a los buenos resultados de las cosechas y las amplias reservas.

Solamente el trigo es un 20% más barato que hace un año. Mientras tanto, la producción de maíz y arroz se ha desacelerado lo que se traduce en un leve aumento de 1,4% y 1,7% respectivamente.
 
Entre los alimentos más afectados por el fenómeno de El Niño se encuentra el azúcar, los lácteos y los cárnicos a excepción de las aves.

El problema de los países importadores


Lo que sucede es que el precio de los alimentos afecta de formas exageradamente diferentes a los distintos países del paneta. Y en primera instancia, son los países importadores los que se llevan la tajada más grande del problema.

Los países importadores de alimentos (en especial aquellos que no tienen desarrollada su seguridad alimentaria) sentirán fuertes presiones inflacionarias con un aumento de los precios (como Colombia). Si este tipo de países es a su vez vulnerable al cambio climático los efectos se multiplican.

"El impacto del rápido aumento de los precios de los alimentos en la inflación del IPC es sustancialmente mayor en las economías emergentes (puntos rojos) que las economías avanzadas (puntos negros)" afirma Rob Subbaraman del Nomura Global Economics.



Fuente Business Insider, datos de 2014

Utilizando dos criterios, el peso de los alimentos en la canasta familiar (eje horizontal) y el porcentaje de las importaciones en el consumo de los hogares (eje vertical), los analistas de Nomura desarrollaron un gráfico que muestra el impacto de la subida de precios de los alimentos en la inflación IPC en varias economías desarrolladas y emergentes.

En Colombia, los resultados son dispares. Por un lado, tomando cifras del Dane, el peso de las importaciones de alimentos destinadas al consumo de los hogares en el total de las importaciones de alimentos es cercano al 65% lo que hace al país muy vulnerable a las fluctuaciones externas.

En segundo lugar, el peso de los alimentos en la canasta familiar es inferior al 30% dejando al país en el intermedio de la gráfica dándole cierto nivel de estabilidad.

Es evidente que los países pobres y con sistemas agropecuarios poco desarrollados son los que sentirán más los efectos climáticos e inflacionarios.

En otras palabras, si el precio de los alimentos sigue bajando al tiempo que la producción nacional se debilita por fenómenos climáticos, los ingresos de ese país caerán consecutivamente al tiempo que los escases de alimentos y el valor de las importaciones se elevaría constantemente.

Es por eso que los logros en materia de seguridad alimentaria son fundamentales no solo para proteger el bolsillo del consumidor, también se pueden evitar grandes problemas de escases de alimentos y contribuir al desarrollo productivo de los países.