Minhacienda propone volver al PRAP para ahorrar gastos

Alberto Carrasquilla, ministro de Hacienda, lleva varias semanas de cruzada en el Congreso, asistiendo a diferentes debates para buscar la aprobación del Presupuesto General, explicar la falta de recursos del país para 2019 y cómo los obtendrá.

Con un Presupuesto General cuyo monto aprobado es de $258,9 billones y un faltante de $25,6 billones, el nuevo ministro está en la tarea de encontrar mecanismos de ahorro a la vez que recauda más recursos para garantizar el correcto funcionamiento de todos los programas y sectores del Gobierno.

Por ahora, el Presupuesto de 2019 está dividido en $157 billones para funcionamiento, $35 billones en inversiones y los restantes $66 billones para el servicio de la deuda, que incluye el pago tanto de intereses como de capital.

Por un lado, el Ministerio de Hacienda trabaja en la refinanciación de la deuda que debe pagar en marzo del próximo año, que se acerca a los $66 billones, de modo que con nuevos créditos a mayor plazo pueda cubrir por lo menos una buena parte de dicha deuda y que los recursos que la Nación ya tendría asignados para ese pago se destinen a una mayor inversión.

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De acuerdo con Carrasquilla, ya hay una parte de esa deuda que fue refinanciada de dicho modo.

Otra opción es la reducción del 10% de la evasión de impuestos, para lo que se necesita un sistema tributario más sencillo y con menores exenciones, así como una Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) reformada y más efectiva.

Por último, el ministro de Hacienda ha propuesto una reducción en los gastos de funcionamiento. La novedad es que ya tiene identificados $1,2 billones que podrían recortarse en 2019.

Para los siguientes años del gobierno Duque, dichos ahorros se aumentarían.

Y el método para el ahorro de recursos en las entidades públicas sería la versión 2.0 del Programa de Renovación de la Administración Pública (PRAP) que implementó Álvaro Uribe Vélez durante su presidencia.

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La idea de Carrasquilla es aplicar un modelo similar, que según él en esta oportunidad haría un “uso más eficiente de la información” para reducir los gastos innecesarios del Gobierno.

El ministro recordó que implementar dicho modelo hace 15 años “no fue fácil, costó muchas horas de trabajo reorganizando, eliminando y fusionando entidades. Es un trabajo que requiere mucho esfuerzo, pero todos tenemos que seguir en esa dirección. Ya tuvimos esa experiencia y el país debe sentirse muy satisfecho y muy confiado en que se puede lograr”.

Pero además del uso de bases de datos, no se saben todavía mucho más datos de lo que sería la reforma de la administración pública del nuevo gobierno.

Carrasquilla confía en que las tres medidas sumen los $25,6 billones que le faltan al presupuesto de 2019, pues solo la reducción del gasto sería de entre $11,8 billones y $15,7 billones.

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