Portada del "Informe de la economía de la información 2010: TIC, empresas y alivio de la pobreza”, de la Unctad, revelado el jueves en Eafit.

Los celulares, arma en una revolución contra la pobreza

Los teléfonos están ayudando a mejorar el ingreso de ganaderos de leche, pescadores, microempresarios textiles, pequeños agricultores y mendigos en el mundo. El “Informe de la economía de la información 2010: TIC, empresas y alivio de la pobreza” de la Unctad acaba de ser revelado en Eafit de Medellín.

14 de octubre de 2010

En Bhután, los teléfonos móviles transformaron el negocio de los productores de leche. Ahora pueden obtener información sobre precios de mercado y estar en contacto directo con sus clientes, lo que les permite vender a mejor precio y transportar solamente la cantidad de leche necesaria para cubrir la demanda, evitando así desperdiciar la leche y perder ingresos.

Ese es uno de los ejemplos que menciona el reporte “Informe de la economía de la información 2010: TIC, empresas y alivio de la pobreza”, que acaba de revelar la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Comercio y el Desarrollo, Unctad. El lanzamiento del informe en Colombia se hizo en la Universidad Eafit en Medellín.

En el reporte, la oficina de las Naciones Unidas les propone a los gobiernos “formular políticas a que aprovechen plenamente estas nuevas oportunidades en la lucha contra la pobreza, para lo cual habrá que seguir muy de cerca los usos innovadores de los móviles y demás dispositivos de información y comunicación que vayan surgiendo espontáneamente entre los pobres”.

Los usos de los teléfonos móviles son muchos para darles a los más pobres información de precios, de clima y de oportunidades para generación de ingresos.

El informe destaca cómo en la India las utilidades de los pescadores han aumentado 8%, desde que han podido verificar desde el mar en cuál puerto se está pagando más por sus capturas.

El énfasis sobre los celulares tiene sentido porque la penetración de los teléfonos es mucho mayor que la de internet o la de conexiones de banda ancha. “Los mensajes de texto y las ‘llamadas perdidas’ hacen la telefonía móvil más asequible para las personas pobres”, dice Unctad.

También destacó la reducción en los costos de transacción y transferencias de dinero cuando se usan los celulares para hacer pagos y traslados de dinero.

Para empresas
Algunas empresas usan el celular también para promover sus actividades comerciales y mejorar su eficiencia “En Nigeria, los teléfonos móviles han permitido a las microempresas textiles integradas por mujeres reducir sus costos de transacción. Los productores también están ahorrando tiempo y dinero eliminando los desplazamientos que solían ser necesarios para localizar a los compradores y negociar los mejores precios. En Bangladesh se ha instaurado un servicio de ayuda a través del teléfono móvil para ofrecer información y asesoramiento a los pequeños agricultores”, señala el informe.

Incluso la venta de tarjetas prepago o de recarga de teléfonos, en la calle o en tiendas es una forma en la que las TIC ayudan a combatir la pobreza. “En Gambia, por ejemplo, se ofreció a mendigos callejeros la posibilidad de trabajar para una operadora de telecomunicaciones móviles, lo que les permitió aumentar su nivel de ingresos y mejorar su situación social”.


Recomendaciones para los gobiernos
El Informe sobre la Economía de la Información tiene además una lista de recomendaciones para que los gobiernos faciliten el uso de TICs para reducir la pobreza en sus países.


• Para llegar a los grupos más pobres de la sociedad, quienes formulan las políticas deberían centrarse más en apoyar la adopción de las TIC en los niveles inferiores de la actividad económica y con menor complejidad, especialmente en las zonas rurales.
• Las medidas adoptadas por los gobiernos deben responder más a la demanda, ajustarse a los distintos contextos y reflejar las aportaciones de los pobres. Es decir, los gobiernos deberían observar la forma en que los pobres utilizan los teléfonos móviles y otras TIC y actuar en consecuencia.
• Es importante seguir ampliando la cobertura de la telefonía móvil. A finales de 2008 casi la mitad de las poblaciones rurales de los PMA seguían sin tener este tipo de cobertura.
• Las TIC deben ser asequibles. En el caso de la telefonía móvil, podría utilizarse como modelo el ejemplo de Asia meridional, que es el que menos costos presenta. La competencia puede influir a ese respecto: el hecho de que exista un único proveedor de servicios, o un número limitado de ellos, suele suponer mayores costes.
• Los gobiernos deberían hacer mejor uso de los teléfonos móviles al diseñar los servicios de apoyo a las empresas y adaptar esos servicios a la capacidad y la situación de los usuarios de las poblaciones pobres.
• Toda las partes interesadas en el desarrollo deben mantenerse al corriente de los avances en las TIC y prestar la debida atención a su potencial en sus estrategias de lucha contra la pobreza.
• Los gobiernos y los organismos de desarrollo deberían colaborar con el sector privado y la sociedad civil. Normalmente, los proyectos que promueven la utilización productiva de las TIC por las pequeñas empresas, que suelen emplear a pobres, cuentan con la participación de varios interesados que colaboran entre sí.