Las ventajas de las ciudades con identidad de género

Luego de la polémica en Colombia por la inclusión de la equidad de género en los acuerdos de paz con las Farc, el término vuelve a salir a flote y esta vez es el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), entidad que la defiende como herramienta para el desarrollo de las ciudades latinoamericanas.

De acuerdo con el BID, la identidad de género integrada a los planes de desarrollo de cada ciudad permite que dichos planes no sean homogéneos ni inequitativos al suplir las necesidades de solo un porcentaje de la población del lugar.

“Nos hemos olvidado que las ciudades no tienen la misma medida para todos los ciudadanos y, por lo tanto, no pueden ofrecer los mismos productos para todos. En este sentido, es necesario que las ciudades emprendan un proceso de desarrollo con una mirada que realmente refleje la diversidad de sus actores”, señaló la entidad.

De acuerdo con el organismo multilateral, la identidad de género en el desarrollo de las ciudades “se convierte en un factor determinante para su progreso y la sostenibilidad, reconociendo a la mujer como un agente activo en sus transformaciones” y destacó que aunque por el momento se ha trabajado en incrementar el índice de seguridad para el género femenino y restaurar sus derechos, es necesario que también se les reconozca como una parte importante de la productividad y competitividad de sus ciudades.

En ese sentido, el BID destacó tres ventajas que obtienen las ciudades involucradas en esta nueva tendencia de inclusión.

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En primer lugar, las ciudades se vuelven más participativas. De acuerdo con el BID, la equidad no solo está en el acceso a los bienes y servicios sino también en el acceso a la información y a los canales de comunicación.

Por ejemplo, en Ciudad de México existe el Observatorio de la Participación Política de las Mujeres, un mecanismo apoyado en información estadística para hacer seguimiento a los cargos públicos con participación femenina y en Medellín hay cerca de 1.200 mujeres organizadas en 21 colectivos que promueven la participación política y social de las mujeres en su ciudad.

“Promover este ejercicio no solo es una herramienta de empoderamiento a la población femenina, también es una ventaja para la ciudad ya que las mujeres tienen un mayor poder de convocatoria y de concientización frente a la responsabilidad que tienen los ciudadanos de participar y construir ciudad”, explicó el multilateral.

En segundo lugar, estas ciudades desarrollan aún más su cultura. La promoción de proyectos de manualidades, artesanías y similares como método de empoderamiento y generación de recursos para las mujeres, impulsa el desarrollo de la cultura local.

En este aspecto el BID destacó el Taller NU de México que garantiza ingresos para mujeres víctimas de la violencia, que se vinculan en la fabricación de zapatos y productos artesanales, además de asistir a talleres para utilizar sus creaciones como terapia para superar las dificultades que enfrentaron.

Fuente: Banco Interamericano de Desarrollo

Madrid tiene la denominada Ciudad de las Mujeres, un proyecto que busca rescatar la presencia de las mujeres como motor cultural y de creatividad en la ciudad, mientras que Panamá trabaja en la preservación de la tradición indígena en las ciudades mediante el proyecto Dutu Mola.

Por último, se logra la recuperación de espacios públicos y en el mismo sentido aumenta la seguridad en estas zonas. De acuerdo con el BID, incluir a las mujeres en la planeación distrital “es una herramienta para lograr tener espacios públicos que no solo sirvan como punto de encuentro y recreación, sino que respondan a las necesidades diarias de cada grupo de la población”.

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