Corficolombiana: calificadoras mantendrían grado de inversión del país

Las agencias calificadoras se encuentran actualmente en el proceso de revisión y actualización de las calificaciones soberanas de varios países, incluyendo Colombia. Bajo este contexto, Corficolombiana se reunió con las dos agencias que tienen a Colombia al borde de perder el grado de inversión: S&P y Fitch. 

Vale la pena recordar que al inicio de la crisis generada por la pandemia y el desplome de los precios del petróleo (en marzo de este año), S&P ratificó la calificación de Colombia en BBB- pero revisó la perspectiva de estable a negativa, mientras que Fitch recortó el rating de BBB a BBB- y mantuvo el outlook negativo que tenía desde abril de 2019. 

En este sentido, una rebaja en la calificación de Colombia significaría perder el grado de inversión. 

La primera conclusión a la que llegó Corficolombia es que las dos calificadoras consideran que los indicadores macroeconómicos de Colombia son peores a los del promedio de países con grado de inversión, particularmente en materia fiscal y de cuentas externas. 

Sin embargo, tras las reuniones, Corficolombiana cree que ambas agencias optarían por mantener (por ahora) la calificación BBB- del país con perspectiva negativa. En particular, las dos calificadoras podrían dar un margen de espera para evaluar el ajuste macroeconómico y fiscal del país al choque generado por la pandemia.

“El compromiso de ajuste fiscal es un elemento que no está presente en otros países y parece reforzar la confianza de las agencias en el manejo macroeconómico de Colombia respecto a sus pares. De esta forma, el marco institucional y de política económica, así como el buen historial del país en el cumplimiento de sus obligaciones financieras, son fortalezas relativas y permitirían mantener el grado de inversión, al menos por este año”, explicó el documento.

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S&P

Para S&P, una rebaja de calificación se daría en un escenario en donde sea claro que Colombia no logra estabilizar su deuda a mediano plazo y el crecimiento económico se mantiene débil. 

En materia fiscal, destaca la elevada incertidumbre respecto a la sostenibilidad de la deuda pública a mediano plazo, afirmando que antes de la pandemia la “calificación indicativa” de su modelo de calificación era BB+. 

Sin embargo, según Corficolombiana, considera positiva la solidez institucional del país y confía en la capacidad del Gobierno de realizar reformas como lo viene haciendo en los últimos años. Ahora bien, esta agencia tiene dudas frente a la aprobación de una reforma tributaria de la magnitud que espera el Gobierno y a la efectividad de la factura electrónica y la enajenación de activos en 2021. 

La agencia no dio una fecha específica sobre cuándo anunciaría su decisión, pero afirmó que puede hacerlo hasta 12 meses después del último pronunciamiento, es decir, podría esperar hasta marzo de 2021. 

Dentro de los factores negativos, S&P estima que la deuda pública aumentará casi 16 puntos porcentuales (p.p.) entre 2019 y 2020, como consecuencia de la pandemia, lo que reduce el espacio de estímulo fiscal. 

Por el lado de la actividad económica, espera una contracción de 8% en 2020 y un crecimiento de 5,5% en 2021, aunque la capacidad de largo plazo se podría ver afectada por la lenta implementación del proceso de paz. 

Según la agencia, el programa de infraestructura 4G y 5G puede incrementar el crecimiento potencial, pero la competitividad del país sigue siendo baja y tomará tiempo ver los efectos de las mejoras en infraestructura.

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Fitch

Esta agencia confirmó que antes de finalizar este año tendrá un comité para definir la calificación de Colombia, y el pronunciamiento dependerá de la capacidad y el compromiso del Gobierno para realizar el ajuste fiscal. 

Fitch fue contundente en afirmar que, si esto no sucede, es seguro que Colombia perderá el grado de inversión. En este sentido, la calificadora espera que la deuda pública alcance un pico el próximo año en la medida que la reforma fiscal lograría estabilizarla a mediano plazo. 

Según Corficolombiana, a Fitch le preocupa especialmente la posición fiscal de Colombia en 2022 y, al igual que S&P, considera que la incertidumbre política es alta. 

En materia de actividad económica, Fitch espera que el PIB se contraiga 6,9% en 2020 y aumente 4,5% en 2021, por lo que considera que las proyecciones del Gobierno son muy optimistas y pronto habrá una revisión a la baja.

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