La industria de cruceros se expande gracias a los precios del petróleo y la creciente demanda. | Foto: Bloomberg

Petróleo

El viento de los precios del petróleo sopla a favor de los cruceros

Se habla del impacto negativo en las exportaciones con respecto al desplome de los precios del crudo. Sin embargo, hay industrias que disfrutan de la caída de precios del combustible, entre estas, la de los cruceros.

11 de noviembre de 2015

El año pasado la industria de cruceros era una de las más beneficiadas con la reducción del precio de petróleo pues para el segundo trimestre del año 2014, la compañía más grande de cruceros, Carnaval Corp. reportó US$527 millones en costos de combustible, mientras que en el mismo periodo del año 2013 registró costos de US$555 millones.

Lo que ha generado este cambio en el panorama del combustible es que hubo un exceso de petróleo en Estados Unidos. Por lo tanto, la sobreoferta de la industria petrolera redujo la dependencia del petróleo extranjero. 

Mientras tanto, la línea de cruceros de Noruega, Norwegian Cruise Line, redujo el consumo de combustible diario promedio en un 5,1%, pese a que la compañía había comprado más combustible a principios del año pasado para abastecer la nueva flota de cruceros Norwegian Getaway.

En Norwegian Cruise Line, la bonanza causada por el petróleo “se reinvierte en mejoras de productos e iniciativas estratégicas de marketing” así como en nuevos programas de mejoras de alimentos, de acuerdo con la compañía.

En este año la historia es aún mejor

De acuerdo con CNN, el buen momento de los cruceros continúa a lo largo de este año, pues a finales de octubre, Royal Caribbean, reportó resultados superiores a los pronósticos de Wall Street y esto impulsó un crecimiento del 3% de las acciones llegando a un máximo histórico. 

Así mismo, las acciones de su rival, Norwegian Cruise Line, también alcanzaron un récord, mientras que las de Carnaval llegaron al precio más alto registrado en los últimos 10 años.

No sorprende que parte del auge de la industria sea por cuenta de los precios del petróleo, pues Royal Caribbean aseguró que los costos de combustible en el tercer trimestre se redujeron más de un 13% respecto al mismo periodo de hace un año. Lo anterior le ha permitido a la compañía ahorrar más de US$110 millones de dólares en combustible en lo que va del año.

De acuerdo con CNN, las compañías de cruceros no están atravesando por buenos vientos sólo por menores gastos, sino también porque la demanda ha crecido y los consumidores están más dispuestos a gastar más, una vez que están en el barco.

Los cruceros están en auge en el país

La industria de cruceros se está expandiendo en el país. De acuerdo con el análisis realizado por la Asociación de Cruceros de Florida y el Caribe, en conjunto con el Business Research and Economic Advisor (BREA), durante mayo de 2014 y abril de 2015, la industria de cruceros generó en Colombia 1.089 empleos. Esto representó un crecimiento del 33%, en comparación con el análisis de la temporada entre mayo 2011 y abril 2012, en la que el país generó 819 empleos.

Según el último reporte, Colombia recibió US$37 millones por la llegada de cruceristas. Esto significa un crecimiento del 43% en comparación con el análisis de la temporada entre el 2011 y 2012, en el que se calculó un ingreso al país de US$25,8 millones.

A su vez, el gasto promedio de un crucerista en Colombia, durante la temporada de 2013 y 2014, fue de US$120,7, lo que significó un crecimiento del 22% en comparación con el valor que arrojó el estudio anterior que fue de US$98,8. 

El estudio de Colombia se desarrolló con el apoyo de la Sociedad Portuaria Regional de Cartagena y ProColombia. María Claudia Lacouture, presidenta de Procolombia, aseguró que  “la industria de cruceros en Colombia tiene alto impacto en la generación de empleo para el sector turístico, especialmente en Cartagena que concentra la operación de embarque del país pues este destino recibe anualmente más de 300.000 cruceristas”.

Además se aproxima la temporada de vacaciones en el país y esto genera la expectativa de que los vientos para los cruceros sigan empujando la industria, por lo menos una temporada más.