Diego Mesa, viceministro de Energía del Ministerio de Minas y Energía. | Foto: Tomada de la cuenta de Twitter del viceministro

HIDROCARBUROS

Gobierno responde a críticas por tarifas de oleoductos

El Gobierno ha realizado un correcto proceso de actualización de las tarifas de oleoductos que contó con la participación de todos los actores. Así lo señaló el viceministro de energía, Diego Mesa, respondiendo al debate que se ha suscitado por las medidas adoptadas en este frente, en especial por los nuevos precios para el uso del oleoducto más grande de Colombia, el de Ocensa.

18 de julio de 2019

Cabe recordar que al interior del gremio petrolero existe insatisfacción por el incremento tarifario, especialmente el relacionado con los tramos del oleoducto de Ocensa. El descontento llegó a tal punto que la Asociación Colombiana del Petróleo (ACP) envió una carta al Gobierno manifestando su insatisfacción por el proceso general para determinar las nuevas tarifas, que tuvo lugar durante el primer semestre de 2019.

Lea también: La pelea petrolera por las tarifas del más grande oleoducto de Colombia

Según el Viceministro, el proceso forma parte de una obligación legal establecida por el código de petróleo y cuenta con unos tiempos límite. Esta actualización debe ocurrir cada cuatro años. Al llegar el nuevo gobierno, se estableció que eventualmente podría hacerse una revisión al esquema general para la fijación de tarifas que incluye varias modalidades de negociación, como la directa entre los actores, hasta la fijación unilateral por parte del Ministerio, a través de un acto administrativo.

Según Mesa, este gobierno consideró la posibilidad de revisar el esquema, pero los tiempos no se dieron, pues la actualización debía ocurrir según lo establece la Ley antes de terminar junio.

Aún así, el Gobierno decidió realizar un estudio con el objetivo de determinar cómo reformar el modelo de fijación de tarifas de los oleoductos. Para ello, realizará un proceso licitatorio a finales de este año, con el fin de seleccionar un tercero independiente que analice el tema y, de encontrar que es necesario, hacer propuestas de reforma.

Lea también: Ahora Cenit después de Isagen

Pero mientras llegan los resultados de este estudio, se hizo necesario que el Gobierno diera trámite al proceso de fijación de las nuevas tarifas. Esto incluyó a todos los oleoductos del país y allí se encontró que, de acuerdo con la versión del viceministro, de los 77 trayectos de oleoductos que hay en el país, en 45 se lograron negociaciones bilaterales; es decir, que hubo acuerdo entre las empresas petroleras y los transportadores. Cabe aclarar que un mismo oleoducto puede tener varios segmentos y por cada uno se negocia una tarifa diferente.

Según el Viceministro, hay otro factor que muestra que la renegociación de tarifas fue exitoso: “de los 77 segmentos, 60 fueron resultado de negociación (49 por negociación bilateral y 11 por negociación sin variación en la tarifa), y de esos 49 negociados bilateralmente, 26 resultaron con una tarifa menor o igual a la pasada. Es decir, el 53%”, aseguró. Para él, esto muestra que el proceso se desarrolló en buenas condiciones, aunque insistió en que por la vía del estudio se mirará qué tipos de ajustes se pueden hacer. En cualquier caso, estas decisiones quedan supeditadas a que del estudio se concluya que hay un error en el esquema tarifario que genere un desequilibrio económico para cualquier de los actores de este mercado: productores de crudo y transportadores.

El caso Ocensa

Es claro que uno de los oleoductos que mayor dificultad ha tenido en su proceso de fijación de tarifas es Ocensa, que tiene cuatro tramos cada uno de los cuales cuenta con su propio precio.

Lea también: Las razones por las que The Economist dice que Ecopetrol es la mejor petrolera de la región

El Viceministro reconoció que en este caso hubo discusiones, porque las empresas usuarias de esta infraestructura no consideraban justas las premisas que había sobre las inversiones iniciales y los volúmenes estimados de crudo.

Cuando no hay acuerdo, se da la aplicación de una metodología para fijación de la tarifa por parte de las autoridades, explican en el Viceministerio de Energía.

Esto generó controversia entre las partes y por eso no se llegó a un acuerdo. Cuando no hay acuerdo, explicó el funcionario, se da la aplicación de una metodología para fijación de la tarifa por parte de las autoridades.

En ella, la información que aporta el transportador sobre inversiones, costos y proyección de volúmenes de crudo sirve de base para determinar el nuevo nivel tarifario. En promedio, el incremento en las tarifas para todo el oleoducto de Ocensa fue de 10%. Este fue uno de los motivos de disputa por parte de las empresas productoras.

El otro tema polémico es el horizonte sobre volúmenes de crudo transportados, porque Ocensa previó una caída importante en las cantidades de petróleo que pasarán por este oleoducto en los próximos años. Esto también puso una alerta entre los productores, pues, según la versión de algunas petroleras, las proyecciones de Ocensa implicaban una caída hasta del 30% en la cantidad de hidrocarburos para los próximos años.

Lea también: La producción de EE. UU. dará paso a un petróleo a la baja

El Viceministro señaló que en general la mayoría de oleoductos tenía en sus proyecciones de volumen transportado una curva decreciente. “El esquema tarifario se aplica sobre un panorama de cuatro años. El tema de reservas en Colombia genera debate y hoy es apremiante. El propio Marco Fiscal de Mediano Plazo incluye una caída en el nivel de producción. Aunque tenemos un gran potencial en off shore y tenemos el interrogante sobre los no convencionales, es claro que la realidad es que el país tiene un panorama estrecho en materia de reservas”, comentó.

El Gobierno ha venido haciendo la tarea con la asignación de nuevos bloques petroleros, pero es claro que las noticias sobre nuevos hallazgos no se conocerán sino dentro de tres, cuatro o cinco años.

El debate sobre las tarifas de oleoductos seguirá vigente, pues actualmente cursa en la Superintendencia de Industria y Comercio una demanda en contra de Ocensa por prácticas restrictivas de la competencia. Este proceso aún no ha avanzado en la entidad de vigilancia. Así que en este capítulo, aún hay mucha historia por contar.