El 65% de los delitos ocurre en espacios públicos y el 35% en espacios privados. Las calles y avenidas son los lugares donde más se presentan delitos (49%), seguido de vivienda (21%) y transporte público (13%).

Bogotá más insegura

Según la encuesta de percepción y victimización realizada por la CCB, la victimización pasó de 26% a 39% entre diciembre de 2007 y el mismo mes del 2008.

25 de febrero de 2009

La CCB hizo un llamado a las autoridades y a la comunidad para que fortalezcan el trabajo conjunto y poder mejorar los índices de seguridad de la ciudad.

El llamado lo hizo entidad al dar a conocer los resultados de la Encuesta de Percepción y Victimización realizada en el mes de diciembre, en la cual se encuestaron 7.174 ciudadanos de los diferentes estratos y localidades.

La victimización pasó de 26% a 39% entre diciembre de 2007 y el mismo período de 2008, siendo el registro más alto de los últimos seis años. Por su parte, la percepción de aumento en la inseguridad pasó de 39% a 55%, lo que representa un incremento de 16 puntos porcentuales.

Los resultados en materia de denuncias tuvieron un comportamiento favorable pues éstas se incrementaron al pasar de 33% al 40%.

Victimización
El hurto a personas es el delito más frecuente pues el 63% de los que han sido víctimas manifestó haber sido víctima de éste, especialmente de robo a celulares (31%), dinero (27%) y objetos personales como billetera, reloj y joyas (25%).

El 44% de las víctimas señaló que los delincuentes hicieron uso de la violencia para cometer el hecho. Principalmente emplearon armas blancas, fuerza y armas de fuego.

El 65% de los delitos ocurre en espacios públicos y el 35% en espacios privados. Las calles y avenidas son los lugares donde más se presentan delitos (49%), seguido de vivienda (21%) y transporte público (13%).

Aumentó en 9 puntos el número de víctimas que tomó medidas después de haber sido víctimas al pasar de 65% a 73% de un año a otro. El 80% tomó medidas personales como guardar bien las cosas, no caminar ni dejar la casa sola y no volver a pasar por lugares oscuros.

La victimización directa aumentó en 14 localidades de la ciudad, se redujo en 3 (Santa Fé, Usme y Tunjuelito) y se mantuvo en dos (Chapinero y San Cristóbal).

Percepción
El 55% de los ciudadanos aseguraron que la percepción de inseguridad aumentó, de los cuales la mayoría considera que es por causa de la presencia de grupos como delincuencia común y pandillas juveniles.

El 39% de los encuestados percibe las calles como los lugares más inseguros de la ciudad, los cuales están relacionados con lugares oscuros, con soledad y factores ambientales. El hurto que más preocupa a los ciudadanos es el hurto a personas. A los estratos uno y dos les preocupa en mayor proporción la venta y consumo de drogas y los delitos sexuales, mientras que a los estratos cinco y seis les preocupa el hurto a residencias y el homicidio común.

Si bien los encuestados de todas las localidades percibieron que la inseguridad desmejoró, La Candelaria, Suba, Fontibón y Rafael Uribe fueron aquellas localidades en las que evidenció un mayor deterioro (35%).

El deterioro en la percepción de seguridad puede estar relacionado con hechos puntuales como los petardos que explotaron en el segundo semestre de 2008 e inconvenientes en eventos culturales y/o deportivos.

Por el contrario la percepción de seguridad en los barrios mejoró al pasar de 43% a 49% entre diciembre de 2007 y 2008. Las principales razones fueron calidad de la vigilancia privada y presencia de la policía.

Al analizar por estrato, sólo el 33% del estrato 1 consideró seguro su barrio, frente al 71% del estrato 6.

Institucionalidad
El Número Único de Atención de Emergencias, 123 y las campañas de desarme voluntario son los más conocidos y aquellos que los ciudadanos consideran que contribuyen más a mejorar la seguridad.

El 47% de los encuestados, que acudieron a la Policía por algún motivo, calificaron el servicio como bueno por la atención rápida y ser respetuosos con los ciudadanos.

Uno de los programas de seguridad mejor calificados fueron zonas seguras y agencias especializadas como los grupos Gaula y Antieplosivos.

Principales propuestas de la CCB
Entre las recomendaciones que la CCB dio a las autoridades está la necesidad de fortalecer las políticas de la Administración Distrital, las acciones de la Policía Metropolitana y el compromiso del sector privado y la ciudadanía para reducir los niveles de victimización y mejorar la percepción de seguridad en Bogotá.

Con el fin de mejorar la eficacia de la Policía, la CCB recomienda establecer una evaluación periódica por cada uno de los cuatro comandos operativos en que se divide la ciudad, de tal manera que se pueda realizar un seguimiento de cerca del comportamiento de la seguridad por zonas y poder establecer estrategias para contrarrestar los principales delitos. Para ello, la CCB ofreció su apoyo para el establecimiento de indicadores.

Así mismo, recomienda fortalecer la capacitación permanente en el modelo de Vigilancia Comunitaria y fortalecer la presencia de la Policía Comunitaria en lo barrios de la ciudad.

De otra parte, la CCB propone establecer un Plan Estratégico de Cooperación para la prevención de delitos en sectores residenciales, comerciales e industriales, vinculando a las empresas de vigilancia y seguridad privada, a través de los gremios y de la Superintendencia.

El segundo delito que más preocupa a los ciudadanos es el homicidio común. De acuerdo con las estadísticas de Medicina Legal, la ciudad registra un aumento del 4% en este delito de alto impacto, al pasar de 1.401 a 1.459 casos. Por ello es necesario que las autoridades incrementen sus esfuerzos para reducir el número de casos de homicidios que ocurren en la ciudad.

Finalmente, la CCB recomienda insistir en la prohibición de porte de armas, en particular de armas blancas, teniendo en cuenta que es la principal arma utilizada en la comisión de hurto a personas y alcanza el 23% como arma utilizada en casos de lesiones personales en Bogotá.