Christian Weissbach, presidente para el caribe y américa latina de LVMH relojes y joyerías, vocero de TAG Heuer.

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Amor al lujo de los colombianos trae de regreso a TAG Heuer

La prestigiosa marca de relojes TAG Heuer regresa a Colombia atraída por la devoción de los colombianos hacia el lujo. Así lo explica Christian Weissbach, presidente para el caribe y américa latina de LVMH relojes y joyerías, y vocero de la relojera.

20 de noviembre de 2011

Son relojes de entre mil y 5 mil dólares los que trae a Colombia TAG Heuer. Una colección completa que incluye las series Fórmula Uno, Aquaracer, Link, Carrera, Grand Carrera y Mónaco. Si bien el buen desempeño económico del país y la proyección del mercado atrajeron a la marca, las directivas le apuestan al país debido al asombroso gusto por el lujo de los colombianos.
 
“Es un punto muy importante. Estoy muy sorprendido al darme cuenta que en Colombia las personas poseen una gran comprensión del lujo; un gran entendimiento de la importancia de los bienes de lujo, más que en cualquier país de américa latina”, afirma Weissbach.

El directivo de la relojera está desde marzo de 2011 recorriendo América Latina, buscando nuevos espacios para la marca. La región es la prioridad actual de TAG Heuer. Así encontró que “los colombianos entienden esto del lujo, y lo aman”.

Tanto es así, que uno de los embajadores internacionales de la marca fue Juan Pablo Montoya, el bogotano que corría en la Fórmula 1 y ahora en la Nascar de Estados Unidos. “Tuvimos una edición especial para este mercado hace un par de años, y podríamos diseñar otra con ciertas especificaciones para darle un toque local a la marca”.

La marca está haciendo reajustes y renovaciones para llegar al país con nuevas gamas, principalmente en el público masculino. Sin embargo, “vamos a poner mucho énfasis en la gama para mujeres. Sobre todo en los relojes hechos con cerámica y diamantes”.

La principal gama será la tradicional Carrerá, introducida desde 1887 y relanzada este año. “Somos líderes en el segmento de relojes entre mil a 5 mil dólares. Y en cada uno de los subsegmentos en ese rango traeremos nuevos productos”.

Además del gusto por el lujo, entre los países latinoamericanos Colombia presenta unos signos de crecimiento superior a los que se pueden ver en Europa y Estados Unidos actualmente.

“Estamos convencidos de que tenemos un gran potencial. Primero que todo por la buena economía de base, con un PIB que crece por el 5%; tenemos además colombianos que son muy apasionados por TAG, con un ambiente muy fuerte y muchas personas con el deseo de consumir nuestros productos”.

Esa combinación entre tasas económicas positivas y el amor por los productos de lujo alentó a la relojera a buscar posicionarse en el país.

“Es sorprendente todas las boutiques que se pueden ver en toda la ciudad, incluso en el centro. Uno ve boutiques de marcas muy reputadas en el mundo”, añade Weissbach.

Además, asegura que en el país hay un gusto especial por la marca TAG Heuer. “Había mucho interés, muchas preguntas sobre nuestros productos. La gente estaba realmente rogándonos porque invirtiéramos y basáramos nuestra marca muy fuerte aquí, como una prioridad para Colombia”.

Ese interés lo notaron en la red de distribuidores que por 20 años ha mantenido vigente la marca en la mente de los compradores colombianos. “Para mí es realmente sorprendente como es de fuerte la marca aquí. Me impactó la reputación que tiene en Colombia”.

Weissbach ha trabajado más de 20 años con TAG, y ha viajado por Asia y Europa. Pero afirma no haber visto nunca antes unas expectativas tan enormes como las del mercado en Colombia.