Su chaqueta

La chaqueta es sin lugar a dudas uno de los artículos más esenciales de la moda en el guardarropa masculino. Se puede usar con la camisa y la corbata apropiadas para reflejar una permanente elegancia, o con un suéter de cuello polo para un "look" más deportivo, e inclusive con un par de jeans para los más informales.

En los años ochenta Giorgio Arman¡ se hizo famoso al iniciar una revolución en la moda masculina al eliminar las pequeñas líneas informes de los hombros e introducir las hombreras en las chaquetas masculinas, dando comienzo a una nueva era en la moda de hombre conocida como "vestirse con poder". A medida que el auge financiero de los años ochenta aumentó en los Estados Unidos y Europa y los hombres empezaron a ganar y a gastar más dinero, las hombreras también crecieron. Esto además hizo que las chaquetas en general fueran de corte más angular y más amplias.

Pero como con la mayoría de las revoluciones, la burbuja se reventó y en los años noventa el dinero se hizo más escaso y los diseñadores regresaron a unos cortes más tradicionales, con hombreras más pequeñas y pantalones más estrechos. La ventaja del corte tradicional es que ahora existe algo para todas las personas y cortes que le sirve a (casi) todas las figuras. Existen chaquetas ajustadas y cortas, con aperturas largas o sin aperturas, rectas o cruzadas, clásicas con uno o dos botones y de vanguardia con 3 a 5 botones (en furor en Europa). Pero si usted es banquero o un hombre de negocios cuya imagen refleja su trabajo, no caiga en la trampa de la moda comprando el último grito esta temporada.

El hecho cruel de la vida es que a medida que envejecemos, la gravedad toma su venganza. Todo parece colgarse y el muscular pecho se convierte en una barriga redonda: La norma general es que a los que tienen estómago grande les queda mejor una chaqueta recta con dos botones. No es agradable ver la tela en una chaqueta cruzada estirándose hasta sus límites y con los botones pidiendo a gritos un refuerzo. Los que tienen caderas más amplias deben usar chaquetas con aperturas más largas y hombros amplios para comodidad y libertad de movimiento, así como para dar fa sensación de una figura estilizada. Los hombres corpulentos deben quedarse con los colores oscuros. Si usted no es muy alto, las rayas verticales son una buena idea, pero sutiles y angostas. Los hombres de piernas cortas deben buscar una chaqueta un poco más corta, sin que se afecte el balance con una chaqueta más corta que las mangas. Sólo a los hombres altos y delgados se les debería permitir por ley usar las chaquetas cruzadas.

Últimamente los diseñadores están sacando la chaqueta completamente informe, conocida como la "soft look". Este estilo no lleva ni almohadillas ni entretelas y está diseñado para que se amolde al cuerpo de la persona. El hombre de hombros pequeños o caídos no debe usar esta moda. En la práctica, este estilo puede verse demasiado deportivo para la oficina y se ve parecido a una camisa, por lo que no es apropiado para el hombre en busca de la elegancia clásica y de buen tono.

En cuanto a colores, la chaqueta que debe estar en todo guardarropa masculino (y, por supuesto, femenino) es el blazer azul oscuro. Se usa con pantalones de flannel grises en el invierno y beige en la primavera y el verano. Como con la mayoría de las prendas, ha sido mejorado por los italianos y los franceses al introducir la tela llamada lana super-100, que no pesa casi nada y no se arruga como sus pesadas contrapartes de lana peinada. En los últimos años también se han visto combinaciones de lana y cachemira en el blazer de varios colores y han obtenido mucho éxito por su elegancia, comodidad y calor. Otras telas importantes para chaqueta son los tweeds clásicos ingleses, en diseño de cuadritos, espina de pescado, príncipe de Gales y el francés pata de gallo. Debido a esta variedad, la chaqueta es uno de los artículos más comerciales y una manera fácil de mejorar y darle vida a su guardarropa.