En el pasado, los equipos de fútbol lograban mantener su operación con los ingresos que les dejaban las taquillas, los patrocinios, las ventas de los pases de los jugadores y no en pocos casos con el apoyo de mecenas, algunos de dudosa reputación.Con los cambios en las leyes, la llegada de conglomerados económicos y la presencia de poderosos grupos regionales, así como nuevas estructuras societarias, entre otras transformaciones, empezaron a modificar el modelo y a buscar nuevos recursos.Uno de ellos ha sido la televisión, que ha venido reformando la estructura, no solo en Colombia sino en el mundo. Por ejemplo, en la Liga española, para el Real Madrid representa más de 20% de sus ingresos, al igual que para el Barcelona, mientras para el Atlético de Madrid es casi 35%. Para equipos más pequeños –como en Leganés– puede significar más de 90% cada año.Recomendado: El fútbol profesional colombiano se diversifica y sus ingresos crecenSin embargo, en Colombia –de acuerdo con cálculos de la Division Mayor del Fútbol Colombiano (Dimayor)– los porcentajes son menores. Por ejemplo, para el Atlético Nacional los ingresos de televisión representan 3% y en el caso de Junior y Millonarios es de 7%.En el país los ingresos por televisión se dan a través de Win (canal de televisión cerrada y en el que participan en partes iguales RCN y DirecTV, que hoy es de AT&T) y RCN (abierta e internacional).“Desde 2012, la televisión ha sido determinante en el mantenimiento de los clubes. Hemos identificado que, como esto avanza tan rápidamente, los recursos que percibimos con Win básico y la televisión abierta no satisfacen a los clubes porque comparativamente con los clubes de Latinoamérica hay un gran desbalance. Por ello, hemos decidido cambiar nuestro core business en televisión y orientar los esfuerzos a la conformación de un canal Premium donde va a desaparecer la abierta y todo va a estar allí”, dice Jorge Perdomo, presidente de la Dimayor.Lo que se pretende hacer es recoger el contrato de la televisión abierta con RCN –que será socio en ese nuevo proyecto– y crear Win Premium, a donde se llevarán en vivo todos los partidos de la Liga Águila. Se conservará Win Básico para que en esa parrilla se transmitan los demás partidos del Torneo Águila (la B), el fútbol femenino y algunos clásicos de la Liga, pero en diferido.En el canal Premium, DirecTV –AT&T– y RCN siguen con participaciones de 50%-50% y la Dimayor pretende una remuneración fija y otra variable: a medida que se incrementa el número de usuarios aumenta su remuneración.Lea también: Los modelos administrativos a seguir en el fútbol colombianoHoy, por ingresos de televisión la Dimayor recibe cerca de US$33 millones anuales, y –según Perdomo– se espera que en 5 años los ingresos puedan más que duplicarse y llegar a los US$70 millones.La decisión de buscar más recursos para los equipos es parte de la estrategia –en tres frentes– que adelanta la Dimayor para darle un nuevo impulso al espectáculo. Uno es mejorar la experiencia del consumidor, no como hincha sino como cliente en los estadios. El segundo es expulsar la violencia del espectáculo. Estudios del fútbol en Colombia muestran que, en promedio, 65% de los encuestados considera que es peligroso ir al estadio y en algunas ciudades la cifra aumenta a 80% y para ello es la carnetización.El tercero es darle mayor calidad al espectáculo y que los equipos tengan más recursos para contratar figuras –como lo hizo el Junior al ‘repatriar’ a Teófilo Gutiérrez y a Yimmy Chará–, que le permite aumentar la venta de abonos y garantizar mejores taquillas. Además, para equilibrar sus finanzas los equipos deben vender rápidamente sus figuras más jóvenes. De hecho, Colombia es la octava liga en exportación de jugadores. La idea es que puedan retenerlas un tiempo adicional.En qué vaDada la coyuntura de desaceleración en la economía, ¿es un buen momento para arrancar con este proyecto? Según Perdomo, se han realizado estudios que han identificado el interés por este canal. “La respuesta es que 48% de los encuestados, que nos reflejan los 5,2 millones de suscriptores que tenemos, estarían en disponibilidad de comprarlo. Y 23% de ese 48% está con la firme disposición de adquirirlo”, dice el presidente de la Dimayor. El proceso avanza y ya se han dado tres reuniones en las que han participado los presidentes de AT&T en Colombia, RCN y Win y, por la Dimayor, la comisión de mercadeo acompañada por Perdomo.En la ecuación también entrarán a participar los cableoperadores, cuya experiencia en el pasado no fue la mejor. En 2011, cuando la Dimayor entregó los derechos de transmisión a Win, Claro, Tigo Une y Movistar se sintieron perjudicados porque no hubo opción preferente. Solo hasta 2015 incorporaron en sus canales a Win, pero se convocó un tribunal de arbitramento que falló a favor de ellos y la Dimayor tendría que pagarles cerca de $22.000 millones. Sin embargo, una sentencia de La Sección Tercera del Consejo de Estado anuló el laudo arbitral, al considerar que se equivocaron al omitir su deber de elevar el caso a consulta prejudicial ante el Tribunal de Justicia de la Comunidad Andina. Hoy la posibilidad de convocar un nuevo tribunal está abierta.La Dimayor pretende una participación superior a la que existe hoy en Win básico y el ingreso por ese concepto no se va a deteriorar. “Buscamos una participación en la junta directiva del nuevo canal e injerencia en la línea editorial”, dice Perdomo.Se espera que entre diciembre y enero se tenga humo blanco sobre la decisión y la entrada en operación del nuevo canal; pues, como advierte una fuente cercana a la Dimayor, cada mes que no funcione es dinero que no reciben los equipos.Recomendado: Los 4 clubes de fútbol colombiano que siguen en reorganizaciónSin embargo, además del tema económico hay una consideración de coyuntura: la de orden político. “El año entrante hay elecciones presidenciales y no queremos que este negocio, que es eminentemente privado pero con implicación social, sea tomado como elemento electoral”, agrega Perdomo.En un año complejo, con Mundial, elecciones y una dinámica económica que se estima apenas un poco mejor que la de 2017, la Dimayor busca nuevos recursos para los equipos y se espera que el proceso no sea tan traumático como en el pasado. ¿Lo logrará?.Más patrocinioEl Presidente de la Dimayor confirmó la confidencia de la edición anterior de Dinero, en el sentido de buscar nuevos patrocinadores para la Liga Femenina del fútbol profesional. Según Perdomo, Águila, que tiene el patrocinio completo de la Liga, abrió esa posibilidad.Para que los clubes puedan recibir la licencia que se entrega para 2019 y participen en el campeonato, es obligación competir en la Liga Femenina. De acuerdo con la información inicial de Dinero, la inversión asciende a US$4,5 millones en la organización del campeonato Liga Femenina Águila, que se jugó por primera vez en Colombia, con 18 equipos. Como el objetivo es organizar dos campeonatos el próximo año, la inversión será superior y por eso la búsqueda de más aliados. Las mayores posibilidades están por el lado del sector financiero.Puede interesarle: ¿Cómo va el negocio del fútbol en Colombia?