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Se suceden los indicadores negativos en la economía de EEUU

25 de septiembre de 2008

WASHINGTON _ Las ventas de casas nuevas cayeron en agosto a su menor nivel en 17 años, mientras el precio promedio de venta bajó en la mayor cantidad de que se tiene registro, en una demostración de la magnitud del problema que Washington trata de solucionar.

El Departamento de Comercio dijo el jueves que las ventas de casas nuevas cayeron un 11,5% en agosto a una tasa anual de venta de 460.000 unidades _cifra ajustada a la temporada_, el ritmo más bajo desde enero de 1991.

Fue una declinación en las ventas mucho mayor que la del 1% anticipada por los economistas. El precio promedio de una casa nueva vendida en agosto cayó en una cantidad récord del 11,8% a 263.900 dólares, en comparación con el promedio de julio de 299.100 dólares. El precio medio también bajó el 5,5% a 221.900 dólares.

Aparte del desalentador informe sobre viviendas, el gobierno informó el jueves que las nuevas reclamaciones de ayuda por desempleo subieron la semana pasada a su mayor nivel en siete años. Las órdenes a las fábricas para productos manufacturados grandes cayeron en una cantidad mucho mayor a lo anticipado de un 4,5% en agosto. Ambas cifras indican las crecientes presiones que enfrenta la economía.

La gran caída en las ventas de casas nuevas sucede a la noticia del miércoles de que la venta de casas usadas había bajado un 2,2% en agosto a una tasa anual de 4.910.000 unidades. Ambos segmentos del mercado siguen bajo la presión de la mayor declinación en décadas en el terreno de la vivienda.

Esa declinación ha contribuido a un aumento récord en las moras hipotecarias, lo que significa pérdidas por miles de millones de dólares de las firmas financieras y la profundización de una crisis crediticia que amenaza sumir al país en una profunda recesión.

En un discurso televisado a la nación, el presidente George W. Bush dijo el miércoles por la noche que la crisis crediticia podía desencadenar "una prolongada y dolorosa recesión" a menos que el Congreso actúe expeditivamente para aprobar un plan de rescate del sistema financiero por 700.000 millones de dólares.

El titular del comité bancario del Senado, Christopher Dodd, dijo a la prensa después de una sesión negociadora con líderes demócratas y republicanos de ambas cámaras que el grupo "convino un acuerdo fundamental sobre una serie de principios". Otros legisladores pronosticaron que el paquete será aprobado por el Congreso y firmado por el presidente.

Temprano por la tarde, el índice industrial Dow Jones había subido 240 puntos. El Dow cayó 563 puntos, un 4,95%, en las primeras tres sesiones de la semana, de modo que las compras del jueves no sorprendieron a nadie.

 

AP