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Santos asegura gobernabilidad para acuerdo de paz

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, dio un paso importante en el camino hacia la reelección al mantener la mayoría de los 268 escaños del Congreso, lo que le garantiza la gobernabilidad para impulsar en el legislativo los acuerdos de paz que eventualmente logre con la guerrilla de las FARC.

10 de marzo de 2014

Aunque la coalición de Gobierno ganó la mayoría de los 102 curules del Senado y los 166 de la Cámara de Representantes disputados en las elecciones legislativas del domingo, perdió terreno frente al ex presidente y ahora senador Alvaro Uribe, que con su partido Centro Democrático se convirtió en la primera fuerza política de oposición con 31 curules.

El nuevo congreso, que se posesionará en julio para un periodo de cuatro años, tendrá un papel decisivo en la implementación de los acuerdos que negocia en Cuba el Gobierno con la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) para lograr la paz y poner fin a un conflicto interno de medio siglo que ha dejado al menos 200.000 muertos.

"Fue un gran día para la coalición de la paz", dijo Santos el domingo a la medianoche, al celebrar que el Partido de La U, el más importante de la coalición, haya logrado la más alta votación en los comicios legislativos que estuvieron marcados por una abstención del 56 por ciento.

La coalición de Gobierno, formada por los partidos de la U, Liberal, Conservador y Cambio Radical, obtuvo unas 185 curules en los comicios legislativos.

"Se consolidaron las mayorías de la coalición de Gobierno en el Congreso, pero también fue una señal muy importante para el país y el mundo entero en que la inmensa mayoría de los colombianos queremos la paz", precisó el mandatario.

Los resultados de las elecciones legislativas mostraron, de acuerdo con analistas, que el presidente cuenta con un sólido respaldo para ganar un segundo periodo de Gobierno.

Santos, un político de centroderecha de 62 años, es favorito para ganar la reelección en las presidenciales de mayo, aunque un inusitado nivel del voto en blanco y de indecisos lo podría obligar a medirse en una segunda vuelta, posiblemente con Oscar Iván Zuluaga, el candidato de Uribe.

OPOSICION DE URIBE

La apuesta del presidente es concluir cuanto antes un acuerdo con la guerrilla para pasar a la historia como el hombre que puso fin al conflicto más extenso del continente.

No obstante, Uribe y sus copartidarios podrían intentar bloquear leyes que faciliten a los líderes de las FARC entrar a la política sin pagar una considerable pena de cárcel.

El ahora senador se opone a que los líderes de las FARC, consideradas terroristas por Estados Unidos y la Unión Europea, puedan ser elegidos legisladores en el futuro sin haber pagado con prisión por los delitos cometidos en medio del conflicto.

"Estamos aquí para enfrentar el riesgo del castro-chavismo", dijo Uribe en una referencia indirecta al papel que jugará frente a la negociación de paz.

Aunque el respaldo de Santos en el Congreso se redujo con el avance de Uribe como opositor, no afecta dramáticamente el apoyo requerido para impulsar reformas que sólo necesitan una mayoría simple.

El presidente necesitará el apoyo del Congreso elegido el domingo para impulsar reformas para reducir el desempleo de cerca del 9 por ciento, la pobreza que afecta a casi la mitad de los 47 millones de habitantes y alentar el crecimiento de la cuarta economía de América Latina con mayor inversión extranjera

Los partidos de izquierda como el Polo Democrático y la Alianza Verde, opositores al Gobierno, lograron en conjunto 19 curules, pero de acuerdo con analistas apoyarán los esfuerzos de Santos para consolidar la paz con las FARC y posiblemente con el más pequeño Ejército de Liberación Nacional (ELN).

"Si bien se debilita en parte la coalición de Gobierno, los apoyos a la paz de mantienen ampliamente mayoritarios y por lo tanto hay gobernabilidad para la paz", dijo el analista y profesor de la Universidad Nacional, Alejo Vargas.

Reuters