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Retrazo del Cafta oscurece futuro para TLC andino

Fuentes del Gobierno de EE.UU. dicen que escándalos en el Congreso y año electoral no influyen, empresarios creen que sí.

10/1/06
16 de diciembre de 2005

Debido a las demoras en la adecuación de las legislaciones locales de los países centroamericanos, el Cafta, que debió entrar en vigencia desde el 1 de enero pasado de acuerdo con las fechas previstas en la negociación, fue aplazado, tentativamente, hasta febrero.

El presidente de la Cámara de Comercio de EE.UU., Thomas J. Donohue, dijo que se sentía un poco decepcionado, pero se mostró optimista ante el panorama y señaló que espera que dicho retraso por asuntos que estimó como "clericales" no afecten el desarrollo de alianzas similares con Colombia, Ecuador, Perú y Panamá, que están en proceso de consolidación.

El Cafta ya ha sido suscrito por Estados Unidos, Guatemala, Honduras, El Salvador, República Dominicana y Nicaragua. Costa Rica aún no lo ha hecho, en tanto que Panamá reanudará sus reuniones en Washington, en lo que podría ser la ronda final del proceso que se interrumpió hace 11 meses en la octava ronda.

Por su parte el bloque andino, compuesto por Colombia, Ecuador y Perú también vieron truncadas sus conversaciones luego de que Perú presionara a comienzos de diciembre un cierre de negociaciones con EE.UU., que dejó de lado a los dos primeros.

Donohue dijo que, pese al difícil momento político del Congreso estadounidense, con un escándalo de corrupción latente y año electoral, estaba optimista frente al papel que desempeñaría George W. Bush para avanzar en los nuevos tratados. "Yo creo que con un presidente que cree en el libre comercio podemos encontrar una respuesta positiva en el Congreso", agregó.

Sin embargo, otros sectores explicaron que difícilmente el ambiente en el Congreso estaría como para discutir otros acuerdos este año, luego del retraso en el Cafta, como es el caso del congresista demócrata de Nueva York, Charles Rangel, quien calificó de "atroz fracaso" para Bush el hecho de que el Cafta, que fue prioridad comercial del gobierno, no entrara en vigencia en la fecha prevista.