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Intereses electorales en negociaciones de Doha, dice Lula

A pesar que Lula ha dicho que las negociaciones, que buscan eliminar las barreras al comercio mundial, tienen dificultades y que cada país defiende sus intereses "con uñas y dientes", aseguró en la jornada que sigue siendo optimista sobre la posibilidad de llegar a un acuerdo.

30 de octubre de 2007

Brasilia_ El presidente Luiz Inacio Lula da Silva aseguró el martes que en las negociaciones de la Ronda de Doha, de la Organización Internacional de Comercio (OMC), juegan actualmente más los intereses políticos y electorales, que los económicos.

"Siento que hay intereses y que todo el mundo tiene mucho cuidado político. Lo que hoy esta en juego no es más una cuestión económica, lo que esté en juego hoy es lo que representan los electores de los países que están en la mesa de negociación", dijo Lula en declaraciones difundidas por el servicio oficial de noticias Agencia Brasil.

"Todo el mundo está mirando más las próximas elecciones que la cantidad de dinero que está en juego en las negociaciones", agregó Lula, quien no mencionó ningún país específico.

En septiembre, sin embargo, Lula aseguró que las negociaciones de la Ronda de Doha --llamada así por la capital de Katar, donde fueron iniciadas en el 2001-- necesitaban concluir antes de las elecciones estadounidenses, en 2008. "El mundo no puede esperar las elecciones americanas", dijo Lula el mes pasado durante una visita en Nueva York.

A pesar que Lula ha dicho que las negociaciones, que buscan eliminar las barreras al comercio mundial, tienen dificultades y que cada país defiende sus intereses "con uñas y dientes", aseguró en la jornada que sigue siendo optimista sobre la posibilidad de llegar a un acuerdo.

Sin embargo, advirtió que "es difícil hacer un acuerdo donde nadie pierda. Lo que creo normal es que en esa escala tomemos en consideración...que los ganadores necesitan ser los países más pobres"

Las negociaciones de Doha están empantanadas desde hace al menos dos años por desacuerdos sobre un mayor acceso al mercado agrícola de las naciones industrializadas, una demanda del Grupos de los 20 (G-20) o naciones de enorme poderío agroindustrial como China, India, Brasil y Argentina, a cambio de una apertura en el sector de bienes industriales y de servicios de los países en desarrollo, o la contrapartida exigida por el bloque de 27 naciones de la Unión Europea (UE), Estados Unidos, Japón, entre otros.

 

 

AP