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Evo Morales nacionaliza fundidora de empresa suiza

En un acto en esta localidad al sur de La Paz, Morales suscribió el decreto que otorga al estado el derecho de tomar control del Complejo Metalúrgico Vinto, que supuestamente había sido "subastada" en un anterior gobierno, pues en el pasado fue una empresa estatal.

9 de febrero de 2007

VINTO, Bolivia _ El presidente Evo Morales firmó un decreto el viernes por el que instruye la "recuperación" de la fundidora de metales Vinto, de propiedad hasta ahora de la empresa suiza Glencore.

En un acto en esta localidad al sur de La Paz, Morales suscribió el decreto que otorga al estado el derecho de tomar control del Complejo Metalúrgico Vinto, que supuestamente había sido "subastada" en un anterior gobierno, pues en el pasado fue una empresa estatal.

Vinto es una localidad del departamento andino de Oruro y se encuentra 211 kilómetros al sur de La Paz.

Previamente, un fiscal acompañado de decenas de militares enviados a la zona ordenó abrir las puertas de la fundidora, ante una inicial resistencia de los trabajadores de Glencore, que tenía una plantilla de 450 empleados en Vinto. Después de recibir explicaciones por parte del fiscal, los empleados franquearon el paso sin mayores incidentes.

Morales, quien no mencionó la posibilidad de indemnizar a Glencore, dijo que la empresa fue constituida al costo de 10 millones de dólares, en los años 70, y que fue inicialmente "rematada" a 6 millones de dólares, a principios de la década.

Poco antes de la firma del decreto, el representante de la cooperación suiza en Bolivia, Thomas Henschel, había dicho a la prensa en La Paz que esperaba que el gobierno de Morales "respete el convenio bilateral de protección de inversiones que existe" entre su país y Bolivia, al insistir en que espera que se garantice la seguridad jurídica de las inversiones suizas.

Ante los trabajadores de Glencore y mineros de otras, Morales pronunció un encendido discurso contra el "neoliberalismo" por "la nacionalización de todos los recursos naturales del país", en el marco de su política "antiimperialista".

El mandatario había adelantado el jueves que lanzaría la medida en el marco de su política de estatización de los recursos naturales, que inició con su decreto de nacionalización de los hidrocarburos en mayo de 2006.

Morales insistió en que el traspaso de Vinto a Glencore por parte de la Compañía Minera del Sur (Comsur), en 2003, fue fraudulenta pues no habría respetado una serie de normas legales.

Señaló también que el "saqueo" al estado en este caso, se inició cuando, en 2001, el gobierno de turno vendió Vinto a la estadounidense Coeur d'Alene, que a su vez traspasó sus acciones a Comsur.

Comsur tuvo entre sus socios al ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada, quien vendió sus acciones, de la que formaban parte otras unidades, a la empresa suiza en 2004, después de ser forzado a renunciar, en octubre de 2003, por una revuelta popular que dejó 60 muertos.

Morales señaló que "todas las empresas" que fueron de Sánchez de Lozada serán nacionalizadas.

Antes, el ministro de Minería, el ex minero José Dalence, advirtió que el gobierno no aceptará presiones de "ninguna embajada" en aparente alusión a la misión suiza, que en diciembre manifestó preocupación cuando Morales hizo el primer anuncio de que tenía en sus planes la nacionalización de Vinto.

"Desde ningún escritorio de alguna empresa nos van a decir que hacer, Vinto de ahora en adelante va ser la empresa que monopolice la venta del estaño (...). Ninguna embajada va a decirnos qué hacer", dijo Dalence, quien antes había sido abucheado por algunos mineros de Glencore.

Morales aseguró que los trabajadores tienen garantizados sus puestos y que por tanto no habrá despidos.

 
AP